Lo dijo el propio Sergi Barjuan en la rueda de prensa en Anduva tras la victoria ante el Mirandés:  “Es nuestra obligación saber dónde vamos a competir. Yo el año pasado aprendí lecciones a base de algunas bofetadas que dísteis vosotros (por los periodistas), pero que sirven para aprender. Competimos y el equipo no baja nunca los brazos. Se han gestionado muy bien los movimientos y los tiempos, y eso te ayuda a ganar los partidos”. Y como al César lo que es del César, al Sergi lo que es del Sergi-y sus jugadores-.
Igual que el pasado curso, el Recreativo se atascaba y se nublaba cuando la disposición táctica del rival anulaba el plan A de toque, toque y más toque, el inicio de esta temporada está dando síntomas para confiar en un equipo que está diversificando sus recursos, y dando muestras de una gran capacidad para jugar al fútbol según manden las circunstancias. Y como resultado más cercano, haber cerrado una semana fantástica con tres victorias de tres maneras. Ante el Hércules, el equipo de Sergi echó mano de la paciencia en la elaboración y la efectividad a balón parado para hacerse con los tres puntos. En Copa, ante el Sporting, la capacidad de sufrimiento, no exenta de momentos de gran presión y creación de ocasiones, sirvió para pasar de ronda en el torneo del KO tres años después.
Y este sábado, en Miranda de Ebro, contundencia ofensiva y orden defensivo. El plantel albiazul supo aguantar el juego directo que le planteó desde el principio el conjunto de Gonzalo Arkonada, que llegaba líder al choque. Una forma de jugar que el pasado año hacía temblar al equipo de Sergi, y que este sábado fue perfectamente combatida.
Y si a eso se le suma una eficiencia en ataque de casi el 100%, el resultado no podía ser otro que el claro triunfo. que coloca al equipo onubense en la zona alta de la clasificación.
Tras las cinco primeras jornadas, el Recre de Sergi suma 10 puntos de 15 posible, con nueve goles a favor (cinco en los dos últimos) y seis en contra (cero en los dos últimos). Queda mucho, casi todo, pero el Recre está mostrando un dinamismo en su juego del que adoleció la pasada campaña, dando señales de equipo compacto y con los conceptos cada vez más claros, esté en el campo el jugador que esté. Hasta ahora, el Recre sabe a lo que juega y, por suerte, no siempre juega de la misma manera.
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