La Sección Tercera de la Audiencia Provincial de Huelva ha condenado a dos años y seis meses de prisión a un hombre que rompió la orden que le impedía acercarse a su ex pareja y a la que propinó múltiples golpes en diversas partes del cuerpo causándole lesiones.
Este hombre se enfrentaba además a diez años de cárcel por un delito de abuso sexual, si bien el tribunal en la sentencia, a la que ha tenido acceso EFE, lo absuelve del mismo al no existir "una prueba que, definitivamente y más allá de toda duda razonable, lleve a la indeclinable y única conclusión posible de que abusara de ella".
Por tanto, únicamente lo considera responsable de un delito de lesiones sobre la mujer con agravante de parentesco, por el que le impone dos años de prisión; privación del derecho a la tenencia y porte de armas por tiempo de un año; y prohibición de aproximación a la víctima a menos de trescientos metros.
Tampoco podrá comunicarse con ella por cualquier medio durante cuatro años, además de que lo considera responsable de un delito de quebrantamiento de medida cautelar, por el que suma seis meses de prisión.
En concepto de responsabilidad civil deberá abonar 3.000 euros por las lesiones tanto físicas como psicológicas sufridas por la víctima.
Se considera probado que sobre el acusado pesaba una orden de alejamiento de la víctima desde febrero de 2020, si bien éste, haciendo caso omiso de la resolución judicial y de forma voluntaria, sobre la tarde del 9 de mayo de ese año, acudió al domicilio de la mujer y permaneció allí un día.
En un momento de dicha estancia el acusado, con ánimo de mermar la integridad física de la mujer, le propinó diversos golpes en cabeza, cara, brazos, costillas, torso y piernas; igualmente, y con idéntico ánimo, le propinó dos golpes contra la pared.
Ella sufrió diferentes lesiones que requirieron tratamiento médico durante treinta días, con pérdida temporal de calidad de vida.
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