La Policía Nacional ha inspeccionado 170 instalaciones eléctricas en la zona norte de la ciudad de Granada, detectando 32 enganches ilegales, en el marco de una operación antidroga en que se ha incautado de más de mil plantas de marihuana, y ha detenido a dos personas, que ya han pasado a disposición judicial.
El dispositivo sigue activo y no se descartan nuevas detenciones, según ha informado la Policía Nacional en una nota de prensa en que ha dado cuenta la operación Sofía, en que han sido ocho las viviendas registradas, en las que se han descubierto un total de cinco plantaciones de marihuana, habiéndose incautado 1.013 plantas de cannabis sativa.
Se ha desarrollado en dos fases consecutivas a lo largo del mes de marzo, y comparte los mismos objetivos que la reciente operación Raulín, desarrollada en la misma barriada a principios de este mismo mes, en la que se registraron cuatro inmuebles en cuyo interior se incautaron más de mil plantas de marihuana distribuidas en siete plantaciones, además de descubrir y desmontar 20 enganches ilegales.
A diferencia de esta operación, en la que no hubo detenidos, en la operación Sofía han resultado detenidas dos personas, un varón de 28 años y una mujer de 50, ambos de nacionalidad española, a los que les constan antecedentes policiales, y a los que se los investiga por supuestos delitos de tráfico de drogas y defraudación de fluido eléctrico.
Durante la primera fase de la operación se llevaron a cabo seis registros en distintos inmuebles. En un mismo bloque se registraron tres pisos distintos, resultando que todos ellos poseían enganches ilegales a la red y, en uno de ellos, acababa de cortarse una plantación de marihuana. Sin embargo, en otro de los registros practicados, los agentes se incautaron de 207 plantas con un avanzado estado de desarrollo vegetativo.
En la segunda fase fueron dos los registros practicados. En el primero de ellos, los policías hallaron tres plantaciones perfectamente equipadas con los sistemas necesarios de iluminación y ventilación que requieren los cultivos de interior, habiéndose encontrado además gran cantidad de productos fitosanitarios que estaban siendo utilizados para sacar adelante dichas plantaciones. Estas estaban compuestas por 87, 154 y 78 plantas, todas con un elevado grado de desarrollo. En el segundo de los registros se halló una plantación, con similares condiciones de cultivo, integrada por 487 plantas de la misma especie.
Es de destacar que ninguno de los inmuebles registrados disponía de unas mínimas condiciones de habitabilidad, encontrándose al parecer "totalmente orientados a la producción de marihuana a gran escala".
Paralelamente a la realización de estos registros y en colaboración con el personal de la compañía Endesa, los agentes han llevado a cabo la inspección de 170 instalaciones de suministro eléctrico en la misma zona. El resultado de dichas inspecciones se ha saldado con el descubrimiento y desmontaje de 32 enganches ilegales, destinados todos ellos a la defraudación de fluido eléctrico.
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