El incombustible alcalde de Dos Hermanas, Francisco Toscano, declaró recientemente que el tranvía es un sistema de transporte desfasado para los tiempos actuales y que era mejor apostar por autobuses ecológicos, mucho más baratos y flexibles, y mejor aún si disponen de una plataforma reservada. Sin embargo, el gobierno en ciernes de Sevilla que liderará su correligionario Espadas volverá a empecinarse en gastar 48 millones de euros en la redundante ampliación del tranvía a Santa Justa, tal como ha adelantado el delegado de Movilidad en funciones. Cabrera ha reconocido ya públicamente el secreto a voces de que la línea construida por Monteseirín al coste de 93 millones no es rentable, por lo que se tratará de ampliarla al máximo.
Efectivamente, la estrategia seguida con la primera ampliación a San Bernardo fue suprimir todas las líneas posibles de autobús de Tussam, para que los usuarios no tuvieran más alternativa que subirse al tranvía. Ni por esas. Al cabo de un decenio el tranvía transporta 650.000 viajeros menos que cuando echó a andar y su demanda es un 43% menor que la anunciada por Monteseirín cuando se amplió. Con los 141 millones que se acabarían gastando en total si se vuelve a prolongar se podrían comprar 352 autobuses ecológicos como los preconizados por Toscano y renovar casi toda la flota de Tussam, con un impacto beneficioso en toda Sevilla.
Envía tu noticia a: participa@andaluciainformacion.es