Los vecinos de Cuevas del Campo (Granada) han decidido este domingo en referéndum que las fiestas que acompañan a la festividad del patrón, el 15 de mayo, se celebren el fin de semana más próximo a esa fecha en lugar de en los dos días inmediatamente posteriores, como marcaba la tradición.
Según ha informado a EFE el concejal de Fiestas de esta localidad del norte de la provincia de Granada de unos 1.800 habitantes, Bruno Martínez, de los 521 votos emitidos en la consulta popular (el 29,4 % del censo), 368 han sido a favor del cambio, es decir, por la celebración de las fiestas en el fin de semana más próximo al 15 de mayo, 146 en contra y siete nulos.
La decisión adoptada en consulta popular, que rompe la tradición, se aplicará a partir de este año, por lo que las próximas fiestas de Cuevas del Campo serán los días 15, 18 y 19 de mayo.
La única mesa habilitada para el referéndum en el Salón de los Aljibes, centro cultural del municipio, se constituyó con normalidad a las 9:00 horas, momento en el que se inició la votación, que ha concluido a las 20:00 horas en una jornada tranquila y sin incidencias.
Fue el pasado 30 de enero cuando el Consejo de Ministros autorizó la celebración de esta consulta popular relacionada con las fiestas patronales.
Cuevas del Campo conmemora su patrón, San Isidro Labrador, el 15 de mayo, festividad que aprovechan para celebrar sus fiestas patronales los dos días posteriores (la romería hasta la ermita de la Colonia el día 16 y el acto de bendición de los campos el día 17).
Como el calendario no garantiza que las celebraciones coincidan en fin de semana, como demandan fundamentalmente los jóvenes y quienes viven fuera del municipio, el Ayuntamiento solicitó a modo de prueba a la Diócesis de Guadix en 2017 que, manteniendo el 15 de mayo como día festivo, las fiestas del pueblo se celebraran el fin de semana más próximo a esa fecha.
La Diócesis accedió y autorizó un periodo de prueba de cuatro años, si bien solo pudo hacerse de esa manera dos años -el 2018 y el 2019, porque la pandemia impidió las celebraciones los dos años posteriores-.
Para eliminar la controversia que generaba en el municipio la celebración en una o otra fecha, el Ayuntamiento optó por que fueran los vecinos quienes decidieran la mejor opción a través de una consulta popular, para cuya celebración tuvo que pedir autorización al Gobierno, que la concedió.
La celebración en fin de semana de las fiestas era la opción mayoritariamente defendida entre los jóvenes y quienes viven fuera del municipio, mientras que una parte de la población más mayor prefería respetar la tradición y que todo -festividad del patrón y fiestas- fuera consecutivo.
Según la alcaldesa, la experiencia de los últimos años le ha permitido comprobar que la celebración de las fiestas durante el fin de semana aporta un "equilibrio más dinámico" que entre semana, porque facilita la asistencia y también la participación de los feriantes, lo que al final redunda en la economía local.
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