La Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG), dependiente del Ministerio de Transición Ecológica, va a aumentar sus mecanismos de intervención y sus recursos para lograr que el cierre total de pozos ilegales en el entorno de Doñana "sea una realidad más pronto que tarde".
Así lo ha destacado hoy en declaraciones a los periodistas en el Centro de Recepción de El Acebuche, en Almonte (Huelva), el secretario de Estado de Medio Ambiente, Hugo Morán, después de visitar Doñana acompañado del delegado del Gobierno en Andalucía, Alfonso Rodríguez Gómez de Celis, y del consejero de Medio Ambiente, José Fiscal.
Morán ha destacado que Doñana "es un órgano vital de un muy amplio territorio, Andalucía, con un enorme valor, y tenemos la obligación de conservarlo en las mejores condiciones" y que uno de sus mayores problemas es "garantizar la disponibilidad" de agua.
Ha remarcado que hace años que las distintas administraciones colaboran para asegurar que las aportaciones de agua a Doñana "reúnan las condiciones suficientes de calidad y cantidad".
En este sentido, ha mostrado su apoyo al agente de la CHG que hace unas semanas, mientras realizaba labores de inspección de pozos en Lucena (Huelva), fue increpado, retenido y acosado por parte de un grupo de agricultores.
Según Morán, la CHG y la Junta han realizado "un trabajo impresionante de constatación de irregularidades, persecución de ilegalidad y restitución de la legalidad" y "no van a cejar en el empeño de defender el patrimonio común del conjunto de los ciudadanos".
Ha invitado a la "sociedad en su conjunto a que sea cómplice en positivo de una tarea que no tiene fin, la del proceso de conservación de este espacio".
Ha tenido también palabras para los productores de Doñana que dependen del agua para seguir manteniendo su presencia en los mercados internacionales y ha destacado que "se va a garantizar la trazabilidad y calidad de los mismos expulsando a aquellos que utilizan dinámicas fuera de la legalidad".
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