Siguen a la espera de noticias por parte del Ayuntamiento de Estepona. Los vecinos de Huerta Nueva aún aguardan que el equipo de Gobierno popular se pronuncie de forma oficial sobre el futuro de la gasolinera prevista en una parcela junto a sus viviendas. Empresa promotora, Patrimonial Adonara, y Consistorio cerraron 2013 con un último intento de negociación, un alquiler municipal a cambio de no levantar la estación de servicio, hasta que el municipio pudiera proceder a revisar su PGOU, que data de 1994.
Los residentes colindantes ya conocen de boca de sus comunidades de propietarios que la empresa ha rechazado la propuesta. Y se sienten estafados por sus gobernantes municipales. Ahora volverán a salir a la calle para protestar, hasta el último día, sobre los efectos que una instalación de este tipo puede reportar a sus vidas, en pleno centro urbano. Será el próximo sábado 8 de febrero, a las doce de la mañana, en el Paseo Marítimo, con una concentración a la altura de la avenida Juan Carlos I que discurrirá por el paseo hasta la calle Terraza.
No lo harán solos. Tienen el respaldo de partidos políticos en la oposición y colectivos como el SAT o los despedidos en el ERE. La salud y los efectos nocivos de una gasolinera están en la mente de estos vecinos, muchos de ellos con niños pequeños.
Aunque la ley ampara las intenciones de la empresa, puesto que el Plan General de Ordenación Urbana estipula que la parcela tiene un uso industrial, los afectados siguen apostando porque el Ayuntamiento tiene en su mano mecanismos, como una permuta de terrenos, para trasladar los malos fueras fuera de zonas tan pobladas en Estepona, como Huerta Nueva.
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