El Sindicato de Enfermería (Satse) ha denunciado que ninguna comunidad autónoma cuenta en sus centros hospitalarios con el número suficiente de camas de enfermos agudos a tenor de las indicaciones que estableció el Gobierno para abordar el proceso de desescalada y las realizadas en el Real Decreto-ley de medidas urgentes de prevención, contención y coordinación para hacer frente a la crisis sanitaria ocasionada por el COVID-19.
A través de un comunicado, la organización sindical recuerda que, entre otros criterios, el Gobierno determinó que resultaría necesario para que los distintos territorios pudieran avanzar en el proceso de desescalada el disponer de entre 37 y 40 camas de enfermos agudos en sus hospitales por cada 10.000 habitantes, o, al menos, tener acceso o capacidad de instalarlas en un plazo máximo de cinco días.
Por su parte, en el Real Decreto-ley de medidas urgentes de prevención, contención y coordinación para hacer frente a la crisis sanitaria ocasionada por el COVID-19 se establece que en las comunidades autónomas se debe disponer, o tener acceso o capacidad de instalar en el plazo preciso, los recursos necesarios para responder a incrementos rápidos de casos en base a las necesidades observadas durante la fase epidémica de la enfermedad.
En base a estas indicaciones, y según los resultados del estudio realizado al respecto por Satse, en todas las provincias españolas, con la única excepción de Ourense, y en las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla, "no hay suficientes camas en sus hospitales para los enfermos agudos". En concreto, concluyen se necesitan 90.272 camas de agudos para cumplir el criterio del Ministerio de Sanidad de contar en cada territorio con 37 camas de enfermos agudos por 10.000 habitantes.
Este déficit de camas de agudos en los hospitales se suma al ya denunciado también por el sindicato en lo que respecta a las camas existentes en las Unidades de Cuidados Críticos (UCIs), al haber un total de 36 provincias españolas que no cuenten con el número suficiente en base a los mismos criterios ya mencionados. En este caso, se requieren un total de 2.886 camas UCI, según las estimaciones de Satse.
Ante esta situación, el sindicato reclama que, en el seno de un próximo Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud (CISNS), el Ministerio de Sanidad y las consejerías de Salud establezcan una estrategia de acción conjunta que posibilite el incremento de camas en los centros hospitalarios, tantos para enfermos agudos como para los que se encuentran en un estado crítico.
"No podemos volver a caer en el error de no contar con los suficientes recursos y medios materiales en caso de que se produzca una nueva oleada del COVID-19 y que se generen situaciones tan lamentables con las vividas al inicio de la crisis sanitaria de no tener camas suficientes para poder atender a todas las personas que así lo necesitaban, tanto pacientes con esta enfermedad como con cualquier otro problema de salud", apuntan desde el sindicato.
Por último, Satse incide en que, además de camas, resulta necesario un aumento de las plantillas de enfermeros que prestan sus servicios en las unidades de hospitalización y en las Unidades de Cuidados Críticos para "no seguir superando las ratios establecidas como seguras en cuanto a la asignación máxima de pacientes por cada enfermero".