El presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, ha recibido a los reyes a su llegada al mediodía a la Plaza de la Armería del Palacio Real para dar comienzo a la ceremonia de la Pascua Militar.
Tras llegar en coche oficial por la puerta que mira a la catedral de la Almudena, don Felipe, con uniforme de capitán general del Ejército del Aire, y doña Letizia han saludado a Sánchez, a la ministra de Defensa en funciones, Margarita Robles, y al de Interior, Fernando Grande-Marlaska.
Al acto, asisten también el jefe de Estado Mayor de la Defensa (Jemad), general Fernando Alejandre, y los mandos de los tres Ejércitos, además del director general de la Guardia Civil, Félix Azón.
Las autoridades han escuchado el himno nacional y, a renglón seguido, don Felipe ha pasado revista a una formación de la Guardia Real acompañado por el Jemad y el jefe del Cuarto Militar, almirante Juan Ruiz Casas.
Varios centenares de personas presencian la parada militar en la Plaza de la Armería, en una mañana fría, pero soleada.
El acto va a proseguir en el interior del palacio con el saludo de los reyes a los invitados en la Sala Gasparini, la imposición de condecoraciones a militares y guardias civiles y las intervenciones de Felipe VI y de la ministra de Defensa en el Salón del Trono.
La ceremonia con la cúpula de las Fuerzas Armadas tiene lugar en vísperas de que se celebre la votación definitiva para investir a Sánchez, en la que tiene que conseguir más síes que noes.
La Pascua Militar es una conmemoración que instauró Carlos III después de que España recuperara la localidad menorquina de Mahón, de manos de los ingleses, el 6 de enero de 1782.
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