El presidente de Vox, Santiago Abascal, ha formalizado este lunes su rechazo a un Gobierno presidido por el socialista Pedro Sánchez que cuente con el apoyo de "comunistas, separatistas, proetarras, chavistas y golpistas".
Durante su intervención en el debate de investidura, Abascal ha desgranado todos los puntos que alejan a su formación del PSOE y ha descartado la posibilidad de una "abstención patriótica". "Vox es el grupo parlamentario más lejano al proyecto de Sánchez para España", ha asegurado.
De hecho, ha augurado que si finalmente el candidato socialista es elegido presidente del Gobierno hará "mucho daño a España" y con él en el Palacio de la Moncloa "sufrirán" las clases medias, los catalanes, las fuerzas de seguridad, las mujeres estarán más "desprotegidas", aumentará la inmigración ilegal o continuarán los "salarios miseria".
Sin embargo, ha vaticinado que pese a todo "España resistirá" porque sus ciudadanos están "por encima de sus gobernantes", es "una gran nación" y "aman a su patria". "A pesar de sus esfuerzos por vaciar y relativizar la nación española, sus ciudadanos siguen sintiendo a España", ha insistido.
Además, ha cargado contra su "frente popular" que, a su juicio, anhela un "cambio de régimen" y ha avisado de que los ciudadanos "se pondrán en pie olvidando cualquier diferencia cuando sientan amenazada su patria".
En una crítica a la "dictadura de la izquierda", Abascal ha aprovechado para defender algunos de los puntos más importantes de su programa electoral, como medidas para aliviar las cargas tributarias a autónomos o pymes, clases medias o trabajadores.
También ha denunciado el "apartheid" que sufre su formación, "linchamiento mediático y acoso callejero" que ha llevado, según ha denunciado, a agresiones a sus simpatizantes. Y ha culpado de ello directamente al líder de Unidas Podemos, Pablo Iglesias, por haber lanzado una "alerta antifascista". "Durante un momento se me pasó por la cabeza hacer una alerta anticomunista en Galapagar, ¿qué habría pasado?", ha preguntado en referencia al municipio de residencia de Iglesias.
El presidente de Vox ha arremetido también contra el "feminismo supremanista", el colectivo LGTBi o las ONG que "ni representan a los inmigrantes ni los salvan en el Mediterráneo". "Vox ha llegado para denunciar esta ficción política por la cual unos pocos se arrogan la representación de todos con el dinero de todos", ha avisado.
En este contexto, ha abogado por la recuperación por el Estado de las competencias de educación y sanidad, una bajada de impuestos o el derecho de los padres a elegir la educación de sus hijos; además de un plan hidrológico nacional o libertad para ir a los toros o cazar.
AMENAZAS DE PABLO IGLESIAS A MAURA
Abascal ha dedicado parte de su intervención a lo que considera una "obsesión" con la memoria histórica. "Con el dinero de todos se dicta a los españoles lo que tienen que pensar sobre nuestro pasado", ha denunciado tras tildar de "insulto a la inteligencia" y "ataque a la libertad" la ley de memoria. "Ampliarla es la iniciativa más totalitaria que he escuchado en esta Cámara", ha lamentado.
En este punto, ha asegurado que el fundador del PSOE, Pablo Iglesias, amenazó de muerte al político de la Restauración Antonio Maura y este pocos días después fue tiroteado. Y también murieron años después José Canalejas y Eduardo Dato, que habían mediado en la disputa.
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