El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y los presidentes del Congreso, Ana Pastor, y del Senado, Pío García-Escudero, han ensalzado este jueves el espíritu de diálogo que desembocó en la Constitución española de 1978, del que este año se cumple el 40 aniversario, y lo han hecho en ausencia de parlamentarios nacionalistas e independentistas, que han decidido no acudir al acto.
Tanto Sánchez como Pastor y García-Escudero han presentado en el Salón de Pasos Perdidos del Congreso los actos centrales de la conmemoración de esos 40 años de la Carta Magna, ocasión que han aprovechado para poner en valor las bondades de la ley de leyes.
En concreto, el jefe del Ejecutivo ha destacado que la Constitución, a la que, ha dicho, "hay que honrar" cumpliéndola y haciéndola cumplir, fue posible gracias "al poder de la palabra" y a la "vocación de acuerdo" de los miembros de las Cortes de aquellas época y de los ponentes de la Constitución, a los que ha querido rendir tributo porque la suya, ha dicho, "no fue una tarea sencilla".
LECCIÓN DE GENEROSIDAD
Todos ellos, según ha apuntado el presidente, dieron "una lección de generosidad" de la que a día de hoy se puede seguir aprendiendo "mucho". "A finales de 1978 nació una forma de entendernos, de vernos unos a otros en función de lo que nos une y actuar en consecuencia", ha indicado, para añadir que de ese proceder nació "la España abierta al mundo", que es "pionera" en la defensa de valores universales como "el feminismo, el ecologismo, los derechos humanos y las libertades civiles" y que "ha favorecido la convivencia y vertebrado a España".
"Con la Constitución, consolidamos la democracia y nos integramos en la UE; desde la Constitución, vencimos al terrorismo; a partir de la Constitución, conocimos los beneficios de un país diverso y plural; y gracias a la Constitución, desarrollamos los derechos fundamentales y los principios del Estado del Bienestar", ha destacado.
Y en la actualidad, ha proseguido, la democracia en España está "solidariamente enraizada" en sus instituciones, poderes del Estado y en los ciudadanos. Por ello, Sánchez ha remarcado que con la conmemoración de estas cuatro décadas de la Constitución "afirmamos su vigencia y la honramos reivindicando el valor y el espíritu del diálogo para conquistar el porvenir".
En este punto, el presidente ha hecho hincapié en que la Carta Magna "permite explorar vías de nuevos acuerdos y de alcanzar nuevos y grandes consensos" pero "siempre", ha advertido, que las fuerzas políticas sean "capaces de dialogar", "entenderse" desde la "generosidad" y huyan de "personalismos".
Sánchez ha tomado la palabra después de las intervenciones de los presidentes del Congreso y del Senado en un acto solemne al que han acudido los portavoces de todos los grupos políticos, a excepción del ERC, ni PDeCAT ni PNV, cuyos diputados y senadores declinan cada año participar en los actos de aniversario de la Carta Magna.
LA CONVIVENCIA POR ENCIMA DE LOS INTERESES
En la misma línea que Sánchez, la presidenta del Congreso, la 'popular' Ana Pastor, también ha puesto en valor el significado de aquel "gran pacto" entre españoles que supuso la Constitución y que fue posible, ha comentado, gracias a líderes "generosos" que "pusieron la convivencia por encima de los intereses".
Ese conocido como "espíritu de la Transición" es el que este año, los anteriores y los posteriores, hay que celebrar, ha comentado la tercera autoridad del Estado, con el fin de renovar el compromiso de los españoles con la Constitución.
De su lado, el presidente del Senado, el también 'popular' Pío García-Escudero, ha celebrado que el actual Gobierno renueve el compromiso con la conmemoración de este 40 aniversario de la Carta Magna que ya había expresado el Ejecutivo de Mariano Rajoy, ya que, a su juicio, es importante que todos los poderes del Estado y las administraciones. "Todos somos imprescindibles para hacer realidad el propósito que alienta esta conmemoración", ha afirmado.
Durante su alocución, García-Escudero también ha destacado los principios y valores de la Constitución, como la separación de poderes sin olvidar que la de España es una democracia parlamentaria y que, como tal, el Parlamento debe tener una posición "nuclear" en la vida política. "No hay mejor homenaje que proteger, respetar y potenciar las funciones del Parlamento", ha dicho.
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