La familia de Leire, la niña de 4 años que este viernes resultó herida grave tras precipitarse por una ventana en el colegio público Concepción Arenal de Getafe, ha acusado este sábado al claustro de no vigilar suficientemente al alumnado durante los recreos.
Así lo ha afirmado una portavoz de la familia en declaraciones a Europa Press. En este sentido, han afirmado que la directora y varios profesores se personaron en el Hospital 12 de Octubre donde está ingresada la niña, pero que "no supieron decir a la familia a ciencia cierta una versión de lo sucedido".
Dicha portavoz ha aseverado que los profesores les comentaron que, durante los recreos, "las clases están abiertas y pueden ir al baño cuando quieran", y que se dieron cuenta de la ausencia de Leire cuando vieron "que su abrigo estaba en la arena". "La directora no supo dar una explicación racional", han agregado.
Por ello, han afirmado que tras la conversación les quedó "sensación de inseguridad", y han solicitado que "se pongan otras medidas" para evitar que niños de tan corta edad puedan "campar a sus anchas" durante los recreos.
LA NIÑA, EN ESTADO CRÍTICO
La portavoz ha informado a Europa Press de que, tras sufrir un traumatismo craneoencefálico severo, la niña pasó por quirófano en el Hospital 12 de Octubre, en la que se la retiraron varios huesos del cráneo.
La niña se encuentra en coma inducido y en estado crítico. Los facultativos han planteado la posibilidad de quitar algo de sedación para ver si al despertarla responde a los estímulos. Está recibiendo respiración asistida porque respira levemente, y en función de su evolución de las próximas horas se estudiará si someterla a una segunda operación.
La niña se precipitó este viernes al mediodía por una ventana del primer piso del colegio público Concepción Arenal, con una altura alrededor de 4 metros, al parecer de forma accidental, aunque se investigan los pormenores del accidente, informó un portavoz de Emergencias 112 Comunidad de Madrid.
Por su parte, fuentes de la Consejería de Educación indicaron a Europa Press que, tras conocer lo ocurrido, se personó en el centro la inspección educativa y se remitió también apoyo psicológico.