El líder del PSOE, Pedro Sánchez, ha anunciado hoy que, de ganar las próximas elecciones generales, pondrá en marcha "un ingreso mínimo vital" que proporcione "unos ingresos mínimos a las personas en situación de pobreza".
Esta iniciativa, fijada como prestación no contributiva de la Seguridad Social, ha sido anunciada por Sánchez en Mérida durante unas jornadas sobre derechos de ciudadanía e inversión social.
"Este será uno de los principales compromisos electorales del PSOE y al que pienso comprometer un grueso importante de la inversión presupuestaria junto a la política educativa y científica", ha añadido el secretario general del PSOE.
En su intervención, Sánchez ha asegurado que, "como presidente del Gobierno", se compromete a "acabar con la pobreza infantil en cuatro años" y para ello su Gobierno multiplicará por seis los recursos destinados a paliar la pobreza "hasta alcanzar los 6.000 millones de euros al año".
Arropado por el presidente de la Junta de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, y el alcalde de Mérida, Antonio Rodríguez Osuna, Sánchez ha explicado que dicho "ingreso mínimo vital" estará asociado "a un estado claro de necesidad", en contraposición a una renta básica o ingreso "incondicionado".
En su opinión, aunque esta última idea -la renta incondicionada- puede ser "sugerente" desde el punto de vista académico, es "inviable" desde un prisma presupuestario.
"Es intolerable para cualquier responsable político esperar a que el mercado -a raíz de una recuperación económica y la creación de empleo- reabsorba el elevado volumen de pobreza", ha dicho el secretario general del PSOE.
Ante "la elevada probabilidad", según ha apuntado, de que el problema de la pobreza se convierta en algo crónico, "hay que buscar ayudas desde el ámbito público y en estrecha colaboración de quienes vienen trabajando" en ello, como ONG's empresas ciudadanos.
De ahí que, como así ha explicado, la creación de esta nueva prestación, articulado en coordinación con el subsidio por desempleo, con iguales cuantías, está dirigida "a los hogares sin ingresos y en situación de necesidad, sea cual sea la causa".
Esta medida se diseña como "la última red de protección, cuando persista la necesidad una vez agotadas las medidas vinculadas al nuevo marco de convivencia dirigidas a la inclusión económica, social y laboral, y de mejora de la protección por desempleo".
Según estimaciones del PSOE, esta medida estaría dirigida a unos 730.000 hogares sin ingresos, lo que supone un total de 1,8 millones de beneficiarios, a los que se suman 2,3 millones de menores.
A su juicio, la concepción socialista de una sociedad justa es "aquella en la que cada uno puede desarrollar su proyecto vital, pero también aquella en la que se ayuda activamente a quienes tienen problemas para poder llevarla a cabo".
"La libertad individual no se puede ejercer de manera plena si no se tienen los medios económicos suficientes para subsistir con dignidad", ha recalcado en su alocución, en la que ha recordado a Nelson Mandela cuando éste afirmó que "la pobreza no es natural, es creada por el hombre y, por tanto, puede ser erradicada por el hombre a través de acciones".
"Erradicar la pobreza no es un acto de caridad, es un acto de justicia social", ha afirmado Sánchez, quien ha manifestado que la pobreza no es un concepto abstracto. "Son niños con una sola comida al día, familias que no pueden pagar la luz y el agua", ha dicho.
Asimismo, ha indicado que una de las causas de la pobreza radica en la "extrema" precarización de las relaciones laborales, consecuencia de "la reforma laboral del PP" y que ha llevado a muchos trabajadores a "cobrar sueldos que están por debajo del umbral de la pobreza".
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