En este sentido, se aprobaron las condiciones particulares y de los precios de la promoción de las 36 naves nido que Impulsa ha empezado a construir en las parcelas 288, 289, 295 y 297 del polígono industral Salinas de Poniente y en las que se valorará el hecho de que la empresa haya nacido en alguno de los viveros de la ciudad.
Impulsa inicia así la oferta pública de enajenación de las mismas destacando por un lado la puesta en el mercado de unas naves industrales desde 475 euros/metros cuadrados construidos, al alcance de cualquier proyecto empresarial, innovadores o pymes, así como la garantía de que dichas naves serán un instrumento dinamizador de la actividad empresarial en la ciudad y no un instrumento especulativo, como se venía produciendo con anterioridad.
Es por eso por lo que el consejo de administración acordó incluir en todas las operaciones de ventas que se realicen dos cláusulas restrictivas que impedirán cualquier tipo de especulación con las mismas.
Éstas dos premisas son la prohibición de poder enajenar o arrendar el inmueble adquirido en un periodo de cinco años, así como la obligatoriedad de tener solicitada la licencia de obras y actividad en plazo de superior a los seis meses desde el otorgamiento de la correspondiente escritura pública de propiedad. Se deja patente que el incumplimieno de algunas de estas cláusulas implicaría la reversión automática de la propiedad o del uso hacia Impulsa El Puerto, que ya volvería a gestionar la utilidad del espacio del que se hablara.
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