El eurodiputado del PSOE Ramón Jáuregui ha explicado este martes que los socialistas españoles votarán contra la elección del 'popular' Jean-Claude Juncker como presidente de la Comisión Europea debido al "mandato" del futuro secretario general, Pedro Sánchez, pero también por "coherencia" con el discurso que hicieron en la campaña electoral, basado en la "protesta rotunda contra la política económica de la derecha europea".
Según ha dicho, los eurodiputados socialistas españoles quieren "obedecer" y no "contrariar en absoluto" a su nuevo líder, que ha "hecho bandera" del rechazo a Juncker, según ha dicho en una entrevista en la Ser recogida por Europa Press.
Y eso que, como socialista europeo y "desde un punto de vista personal", el exministro ha reconocido que él se pensaría mucho el sentido de su voto, aunque también se siente "responsable" de la campaña que hizo el PSOE en las europeas.
Mucho más convencido se ha mostrado el también exministro Juan Fernando López Aguilar, que ha defendido que el rechazo a Juncker es el "sentir muy mayoritario" de los militantes y votantes del PSOE, que le piden que relance su "identidad progresista" y que ayude a cambiar las cosas y la política económica en la UE.
"Una forma de cambiar esa orientación extremadamente injusta y catastrófica es no revalidarla votando al candidato muy identificado con ese manejo injusto, catastrófico, que ha beneficiado a los países acreedores contra los más necesitados de financiación", ha argumentado en declaraciones a RNE.
Jáuregui ha reconocido que la decisión "no es fácil", incluso cree que el grupo socialista europea "tiene poderosas razones para votar a favor de Juncker", porque ha logrado "conquistas importantes" en su negociación con el aspirante.
En su opinión, "hay una ventana de oportunidad a un cambio en la política económica europea", porque Juncker es de derechas, pero europeísta y "pragmático". Según ha dicho, el candidato a presidir la Comisión se ha comprometido con los socialdemócratas a aumentar el importe de las políticas de empleo juvenil y a elevar de 25 a 30 años la edad de los jóvenes que podrán beneficiarse.
Por todo ello, cree que los socialdemócratas franceses, italianos o alemanes tienen "poderosas razones" para votar a Juncker, pero los españoles viven "circunstancias particulares", por la "pasión" que pusieron en su campaña de las europeas, personalizando su oposición a la derecha contra quien fue presidente del Eurogrupo.
DEBATE INTERNO
El exministro ha reconocido que el asunto ha provocado debate interno en el seno del grupo europeo --190 diputados de 28 países--, pero que la posición de los socialistas españoles "no podía ser otra". Anoche hubo una "larguísima cena", ha explicado, y este lunes por la mañana se reúne el Grupo Socialista en su conjunto.
Por otro lado, ha recordado que en la Comisión Europea que presentará Juncker en otoño habrá comisarios socialistas, sin olvidar la "gran conquista democrática" que, a su juicio, supone que los jefes de Estado y Gobierno de la UE hayan aceptado que el próximo jefe del Ejecutivo comunitario sea uno de los candidatos que presentaron los partidos el 25M.
A ello se suma que en la Eurocámara la "dialéctica" no es tanto "entre derecha e izquierda" sino entre europeístas y antieuropeos. Así, aunque cada uno explicará las razones de su 'no', ha reconocido que le dolerá compartir el sentido de su voto con euroescépticos como el británico Nigel Farage o la francesa Marine Le Pen.