Las centrales sindicales UGT y CCOO han remitido un escrito al alcalde de Sevilla, Juan Ignacio Zoido, para comunicarle que no volverán a sentar en la Mesa por el Empleo creada por el Ayuntamiento el pasado 9 de septiembre, por manifiesto desacuerdo con su funcionamiento y hasta que el regidor no dé una respuesta satisfactoria a sus reivindicaciones. Según los representantes sindicales, ya solicitaron tanto el día 16 como el 24 de noviembre una reunión al más alto nivel para intentar reconducir la situación, sin resultado alguno.
Los sindicalistas se quejan de que el gobierno local no se sienta como tal a la Mesa, ya que en vez de enviar a la misma a altos responsables del Ayuntamiento para debatir sobre las propuestas que se exponen, manda a simples técnicos sin poder de decisión. A su juicio, tendrían que estar presentes altos cargos municipales cuando se abordan temas de fondo y de calado y no meras medidas coyunturales y a corto plazo, pues se necesita saber si el Consistorio va a respaldar esas apuestas a largo plazo tanto políticamente como con asignaciones de partidas económicas en los Presupuesto.
Pequeñeces
Ahora que tan de moda se han puesto los Reyes Magos por la campaña publicitaria de la Delegación de Economía (que incide no precisamente en su amor al trabajo, aunque sólo sea una vez al año, sino más bien en la vagancia), uno de los representantes sindicales ha invocado la figura de Sus Majestades de Oriente para ejemplificar qué está pasando en el Ayuntamiento: “No queremos escribir una carta a los Reyes Magos -ha declarado-, sino que el gobierno municipal esté presente y diga si se puede hacer o no. El Ayuntamiento –ha añadido- no está en esto, sino en el cierre de las mesas cuanto antes y centrándose en cosas pequeñitas, que son insuficientes a la hora de presentarlas a la sociedad sevillana como medidas por el empleo”.
La segunda queja de los sindicatos de clase es que el Consistorio no lleva los temas importantes a la Mesa por el Empleo, una de las propuestas-estrella del alcalde tras su toma de posesión y que recibió unánimes elogios ante la gravedad de la situación socioeconómica creada por la crisis. Según UGT y CCOO, el Ayuntamiento anuncia de espaldas a la Mesa medidas sobre temas que se están analizando en comisiones creadas al efecto pero sin contar con éstas.
Como ejemplo de esta práctica citan el anuncio de la paralización del Plan de la Vivienda mientras en la Mesa los agentes sociales estudiaban cómo darle un nuevo impulso; y la creación de la Oficina para la redacción de un nuevo Plan Estratégico, a imitación del llevado a cabo por Monteseirín meramente sobre el papel, sin que en la Mesa que teóricamente se ocupa de cómo relanzar la economía y crear empleo para combatir el paro supieran absolutamente nada al respecto.
Los sindicatos aún dan un voto de confianza al alcalde para reconducir la situación y que la iniciativa no fracase por el bien de la ciudad, pero sostienen que no pueden seguir por más tiempo “hablando con una pared”.
Iniciativa conjunta
A la queja sindical por la falta de pulso o de interés del gobierno municipal en mantener viva la Mesa del Empleo se ha unido una iniciativa conjunta de los dos partidos de la Oposición, IU y PSOE, a instancias de Torrijos de convocar un pleno monográfico para debatir en profundidad sobre el drama del paro en Sevilla capital, “una lacerante realidad laboral –en expresión del portavoz de IU- que empeora a un ritmo vertiginoso, traduciéndose en más de mil parados cada mes”.
Al reunir IU y PSOE la cuarta parte de los concejales del Ayuntamiento, el gobierno del PP no podrá legalmente eludir la convocatoria. Llama poderosamente la atención la falta de reflejos políticos de los populares después de la iniciativa de la Mesa por el Empleo lanzada por Zoido hace tres meses, pues no ha respondido aún a la petición de los sindicatos ni tampoco se adhirió a la carta enviada por el portavoz de IU a todos los grupos para pedir la convocatoria del Pleno. Pareciera como si el drama del paro no le concerniese y tratara de derivar esa responsabilidad única y exclusivamente en el Gobierno de la nación y en la Junta de Andalucía.
Y ello a pesar de que Zoido, en su campaña para las elecciones municipales -y el PP en las generales y en las autonómicas en perspectiva-, se presentara como el adalid de la creación de puestos de trabajo e identificara, tanto él como su partido, el paro como el problema número uno de Sevilla, Andalucía y España.
Ayer mismo, el coordinador del Area Económica del PP (A), el exandalucista Rafael Carmona, subrayaba en una tribuna periodística la gravedad de la situación, ya que “en el camino de los brotes verdes que nunca llegaron –escribía- se han quedado (en Andalucía) 1.200.000 parados y el 50% de los jóvenes andaluces en paro”. Y añadía: “Con el PP el objetivo no es que creemos que no estamos en crisis; el objetivo es crear empleo”.
Mil parados más por mes
Ese objetivo no se está consiguiendo en la capital de la comunidad autónoma, Sevilla, pese a que Zoido ha cumplido ya seis meses como alcalde, la octava parte de su mandato de cuatro años. Los datos objetivos expuestos en la carta de petición del Pleno monográfico sobre el empleo no dejan lugar a dudas: “En octubre se volvió a alcanzar un nuevo récord (de paro), alcanzándose la escalofriante cifra de 82.237 parados, lo que supone un incremento de 1.769 personas con respecto al mes anterior y una subida en términos interanuales del 8,4%, superior a la de Andalucía y España, con una tasa del 6,7%”.
El gobierno municipal ha reconocido la gravedad de la situación por boca de su delegado de Economía, Gregorio Serrano, quien en una entrevista con motivo del X foro ABC de Empleo y Formación declaró el pasado 20 de noviembre: “Desgraciadamente, el paro cada vez afecta a más personas, pero es cierto que las mujeres, los jóvenes de entre 30 y 34 años y las personas sin empleo anterior son los sectores de población a los que más está afectando la crisis”. Serrano afirma que “desde el gobierno de la ciudad estamos trabajando sin descanso para aplicar medidas que fomenten el empleo en nuestra ciudad, atrayendo a los inversores, ayudando a los emprendedores y creando un clima de confianza que nos permita relanzar la economía de Sevilla”.
Corto alcance
Esas medidas se han concretado en iniciativas de carácter doméstico como el Programa de Ayudas a Iniciativas Empresariales y el del Fomento del Autoempleo, loables pero de corto alcance, como demuestran las palabras del delegado: “Hoy en día, aquel que se decide a abrir un negocio es un héroe, por eso es necesario darle todas las facilidades que podamos como, por ejemplo, suprimir la tasa de licencia de apertura en locales de menos de 500 metros cuadrados o la bonificación en el ICIO de hasta el 80% de la realización de obras para actividades empresariales. También les prestaremos servicios de asesoramiento, asistencia técnica y orientación para la profesionalización de las empresas familiares del sector del comercio, y la creación de una oficina de atención al inversor, incluyendo servicio especializados de asesoría”.
Mientras el Ayuntamiento lanza programas escasamente dotados de medios para fomentar la capacidad emprendedora en la ciudad no adopta otras medidas más concretas en la lucha contra el paro, como sería la de cubrir sus propias vacantes, ya que según los sindicatos tiene el 11% de sus plazas laborales sin cubrir: sobre un total de 5.397 trabajadores hay 588 huecos en la plantilla. Esta carencia de recursos humanos, heredada de las corporaciones anteriores, afecta a servicios tan básicos para los ciudadanos como los colegios, parques y jardines, las bibliotecas y hasta el cementerio municipal.
Sólo policías
Por ahora, el alcalde sólo ha prometido incrementar la plantilla de la Policía Municipal y hasta crear una nueva unidad, la controvertida de antidisturbios, lo que paliaría la existencia de 164 vacantes, pero sin dotar de más medios a otros servicios. La oferta del gobierno municipal a los sindicatos ha desatado la ira de los representantes de los trabajadores: contratar 25 interinos antes de que expire el año en curso y en 2012, 30 peones con contratos de seis meses sin posibilidad de prórroga. Con estas cifras, los sindicatos estiman que el próximo año el número de vacantes en la plantilla municipal ascenderá a 800, ya que el plan del gobierno local es el de no renovar los 240 contratos que expiran en el primer semestre”.
Así pues, sin que el Ayuntamiento, maniatado por la crisis y por la deuda heredada de las corporaciones de Monteseirín, actúe de locomotora para tirar de la economía local y con la destrucción del tejido empresarial, el balance del primer semestre de Zoido en la Alcaldía en cuestión de empleo no es nada esperanzador, como bien se encarga de recordar Torrijos: “Desde que Zoido es alcalde, Sevilla cuenta ya con 5.548 desocupados más según el Servicio Público de Empleo Estatal”.
Ante este panorama, el Consistorio está últimamente emitiendo mensajes para desviar la atención hacia la Junta de Andalucía. En la entrevista citada, Gregorio Serrano hizo hincapié por dos veces en que es el Gobierno andaluz y no el Ayuntamiento el que tiene las competencias en la materia. Olvidó decir que Zoido se presentó, por oposición a Monteseirín, como el alcalde del empleo. Y si el Ayuntamiento carece de esas competencias, ¿por qué el propio Serrano une a sus títulos de delegado de Economía, Fiestas Mayores y Turismo el de Empleo?