En los documentos que han presentado ante los tribunales, los abogados que se encargan de gestionar el patrimonio del fallecido Michael Jackson alegan que su padre nunca dependió de su hijo mientras éste estaba con vida para sobrevivir económicamente.
Además, señalan que el Rey del Pop excluyó expresamente de su testamento a su padre, con quien mantuvo siempre una tormentosa relación y a quién acusó de abusos y maltratos cuando ejercía de manager de los Jackson Five.
En los mismos documentos, se afirma que Joe Jackson, que pidió que se le pasara una pensión mensual de 15.000 dólares (10.500 euros) del patrimonio de su hijo, busca el dinero para pagar viajes de avión, hoteles, asistentes y costes legales.
El pasado mes de noviembre, cuando presentó su solicitud, Joe Jackson aseguró que sus gastos mensuales superaban los 20.000 euros y que sus ingresos eran sólo de 1.700 dólares. Además afirmó que necesitaba la pensión para ayudar a sus hijos y nietos.
Michael Jackson lo dejó todo listo para que a su madre y a sus tres hijos no les faltara de nada cuando muriera con la creación de un fondo que podría haber crecido en al menos 200 millones de dólares desde el momento de su muerte gracias a las ventas de discos.
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