Regreso al futuro, ¿recuerdan la película? En ella, un joven Michael J. Fox nos deleitaba con idas y venidas al pasado y al futuro, de tal modo que uno acaba por no saber si iba para delante o para atrás. Y así nos encontramos en El Puerto, de vuelta en un futuro con tintes de pasado. Déjenme, una vez más, que me explique. Nuestra ciudad parece que no termina de arrancar, todo parece que se nos vuelve en contra.
Y es que en un mundo tan politizado, la capacidad de concesión se torna un arma, para no conceder a quien pide desde la opción equivocada. Hemos asistido a años de desencuentros entre administraciones de distinto signo, incluso a algunos de ellos, entre administraciones del mismo. No se equivoquen, da igual en la zona del arco político que se sitúen, que todos actúan igual.
Y lo que hoy es bueno para mí, mañana se me antoja malo, si con ello se beneficia a los de la bancada contraria. Y cuando esto se da, es cuando hay que cambiar el relato. “El relato”, otro palabro puesto de moda para normalizar los giros bruscos en los discursos políticos. Y en esa circunstancia se encuentra el equipo de gobierno del Partido Popular, con la suspensión del PGOU aprobado definitivamente en 2013.
Y más concretamente, su titular de Urbanismo, la Sra. Enciso, de la que guardo buena opinión… lo cortés no quita lo valiente. Ella fue una de las más beligerante opositoras al desarrollo del plan ahora anulado. De hecho, al frente de la comunidad de propietarios de Vistahermosa, como presidenta, trató incluso de impugnarlo.
Ahora, como parte integrante de otro, digamos colectivo, se ve en la tesitura de defender la ordenación que tanto criticó o recuperar la de antaño, la del 92. La verdad, no le arriendo las ganancias.
Aunque puede que, aludiendo al símil futbolístico, gane en los despachos lo que no consiguió ganar en el campo de juego... Verán, la anulación por parte del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) nos retrotrae a épocas olímpicas, El Puerto puede volver a la ordenación de 1992. Un plan del pasado para un futuro que ya no es ni tan siquiera presente… Lo que yo les decía: ni el propio Michael J Fox sería capaz de explicárnoslo.
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