El pleno ordinario del ayuntamiento correspondiente al mes de junio, como tantos otros, dio muy poco de sí. Empezó con una nueva modificación, la 20 de este año, del Plan de Ajuste, ese que se vende como una losa inalterable pero que el gobierno de PSOE-IU no para de adaptar a sus necesidades. Y siguió con tres solitarios puntos de acción del gobierno: una corrección de errores; una autorización para superar los niveles de ruido los días del mini Monkey; y una adhesión a la declaración de Córdoba sobre el derecho a la vivienda. Dirá el equipo de gobierno, para qué voy a llevar asuntos de interés si no tengo mayoría asegurada para aprobarlos ni he trabajado para conseguirla.
El grupo socialista presentaba dos mociones instando al gobierno del Estado, que cuando se redactaron se planteaban como demandas a Rajoy pero que ahora resulta que llegarán al nuevo ejecutivo de Sánchez. Una de ellas era relativa a la no inclusión en los Presupuestos del Estado de una partida económica para la construcción de la nueva comisaría de policía nacional, una reivindicación de las históricas de la ciudad. Ahora, sus compañeros socialistas de Madrid deberán explicar el por qué no de esa partida, ya que, por “responsabilidad” y porque así se lo exigía el PNV para votar sí a la moción de censura, han asumido el cumplimiento de dicho Presupuesto elaborado por el PP.
Izquierda Unida, por su parte, convertía el pleno portuense en una subsede de la ONU y traía a debate la cuestión del Estado Palestino y de la embajada de EEUU en Israel. De su papel en el gobierno local y de su responsabilidad con los portuenses, que les votaron o no, ya no se vislumbra nada. Pero, qué importa un pleno más o menos. Qué importa que las decisiones importantes, como la aprobación de los presupuestos municipales, que son las que se debaten en los plenos brillen por su ausencia. Qué le importa a este directorio de PSOE-IU mostrar, aunque sea con pinceladas, un proyecto de futuro para El Puerto después de tres años ¿gobernando?
Estamos ya en pre-pre-precampaña de las municipales del 2019 y el PSOE ha decidido que lo importante es la propaganda, el bombardeo continuo de notas de prensa con sus correspondientes fotos en las que sale el Sr. alcalde solo o con algún concejal socialista (los de IU se han diluido). La campaña de autobombo ha comenzado y deja en pañales la que en su momento realizó Candón y que recibió tantas críticas por parte socialista. En 2015 prometieron un cambio de política y de formas. En 2019, asumidas como propias las políticas y las formas que habían desaprobado, ¿qué van a prometer a los portuenses?
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