Corto pero intenso, así se puede catalogar el bagaje del presidente del Partido Popular portuense Germán Beardo en estos dos meses. De tomar el relevo de Alfonso Candón como presidente local, a pasar a ser oficialmente como próximo candidato de su formación para las futuras elecciones municipales de 2019. Cambios que han cimbreado a una formación acostumbrada a acatar en silencio designaciones y medidas, pero que se ha revelado y fracturado con dimisiones que llegan con un proyecto todavía en formación.
Beardo minimiza las bajas y los cambios que se antojan en una partido que busca ser nuevamente “el más votado”, y a “tener un Gobierno fuerte y mayoritario”. Las dimisiones de tres concejales los asume como “gestos democráticos que son buenos; todos vemos las cosas de manera diferente”.
Precisamente, esa democracia interna, o la falta de ésta, es la que los dimitidos echaban en falta. Sea como fuere, el popular asume el reto con “responsabilidad para ser el próximo alcalde de El Puerto y liderar al mejor partido de la ciudad y el más votado”.
Para ello se está “rodeando de un grupo de trabajo”. Prefiere aún guardar los nombres de las personas que lo acompañarán en este viaje. “Serán personas de prestigio consolidado, de profesionales, de la sociedad civil portuense con experiencia y contrastada”.
Y es que “ante un Gobierno agotado como el que tenemos, debemos liderar un cambio para llevar a El Puerto, el gigante dormido, a despertarlo”. Tiene un ejemplo a seguir y un espejo, según él, a quién mirar y reflejarse: Teófila Martínez, la lideresa y ex alcaldesa de Cádiz. Sentencia, “hay trabajo por delante, pero mucha ilusión”.
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