La tribuna de El Puerto

La maldición de la Plaza de Toros

Ni el mantenimiento del entorno está a la altura, ni el coso mira a convertirse en un escenario predominante para ser un lugar apetecible para ciudadanos

Publicidad Ai Publicidad AiPublicidad AiPublicidad Ai
  • Plaza de toros de El Puerto -

Al igual que una maldición eterna, la Plaza de Toros de El Puerto no halla por cuestiones diversas ser todo un referente más allá de su apuesta taurina, que tampoco lo es. El zigzagueante embrollo eterno en el que se deja cuestionar el coso portuense es de una índole peliaguda, por no ser ni un lugar cuidado para su lucimiento histórico y referente por su cariz taurino para los propios portuenses, a ser menos que una opción en su explotación taurina y de eventos musicales para dejar pasar la oportunidad de transformarse en un espacio atractivo comercialmente, de ocio y de vida.

En la actualidad no deja ser otro botón más del devenir de la ciudad; dejadez y un mantenimiento puesto en duda que aleja de ser el referente del monumento más visitado de toda la provincia de Cádiz. La atonía se refleja cuando en la aprobación del Pliego de explotación la máxima, para una parte de la oposición, es reducir los pases de favor.

Es toda la apuesta de futuro y de bienestar para una Plaza de Toros que debe ser algo más que un lugar donde se disfrute de una corrida de toros.

Adiós quedó la remodelación con su aparcamiento subterráneo y el acondicionamiento de su superficie. Reduccionismo a la máxima de una ciudad que muestra cada vez más debilidad y falta de ideas, penando no solo su patrimonio y pasado, lastrando e hipotecando su presente y lo más penoso, su futuro.

Envía tu noticia a: participa@andaluciainformacion.es

TE RECOMENDAMOS

ÚNETE A NUESTRO BOLETÍN