Complicado pero no imposible. La intención es clara: intentar recuperar las instalaciones deportivas y darles un uso para todos “los clubes de la ciudad”, sostiene el concejal de Urbanismo, Antonio Fernández. La premisa, la que entraña una dificultad añadida al estar dentro del concurso de acreedores del Racing Club Portuense, es valorar con los técnicos municipales la viabilidad económica de recuperar el estadio José del Cuvillo.
De hecho, la reunión está prevista para el lunes de la semana próxima que tratará precisamente los pormenores legales y económicos del estadio portuense. La voluntad del Gobierno, claramente, es poner en valor una instalación señera como ésta, pero no sólo depende de la voluntad.
Aquí queda un trabajo de fondo que implica estudiar los informes referentes al estadio, a su propiedad y a las posibilidades económicas que pueda tener el Ayuntamiento para arreglar el Cuvillo.
Ahí es donde también radica otro de los problemas que pudiera encontrarse, para el caso hipotético de que el Consistorio pudiera reclamar al Juzgado de lo Mercantil nº1 de Cádiz -donde está la causa judicial del Racing Portuense- y ésta accediera a liberar judicialmente las instalaciones.
Sin ser fácil, la segunda cuestión a valorar y sopesar son las reformas urgentes y necesarias que necesitaría acometer un estadio que se encamina hacia el tercer año cerrado (se cerró en noviembre de 2013).
Fernández apostilla “que mantenemos el recuperar el estadio, tal y como se pidió cuando éramos oposición”.
Precisamente, el José del Cuvillo, y según ha podido conocer este medio, continúa sin estar escriturado por parte de la empresa municipal Impulsa El Puerto.
Recordar que tras la construcción de la pasarela Pepe el del Vapor, en una sesión plenaria se acordó compensar los terrenos tras la permuta realizada en 2010.
El intercambio aprobado por el pleno del Ayuntamiento a mediados de 2010, por el que la empresa municipal Impulsa El Puerto se hacía con la propiedad de los terrenos donde se ubica el estadio José del Cuvillo, aún no se ha terminado de formalizar y dicho suelo no figura en el Registro de la Propiedad a nombre de la empresa municipal portuense, a pesar de que han transcurrido cinco años desde que se hiciera la operación.
El objetivo de la permuta era poner a disposición de Impulsa dichos terrenos para que la empresa municipal pudiera llevar a cabo el desarrollo urbanístico de la zona, manteniendo el uso del estadio por parte del Racing Portuense en virtud de un convenio que el club suscribió con el Consistorio en 1990 para que el equipo rojiblanco disputase sus encuentros, en un convenio cerrado para los próximos 50 años.
A pesar de todo y a la espera de que todo pudiera significar un mero formalismo, “la voluntad es recuperar el estadio para todos. El estadio no debe estar sin uso por más tiempo”, añadió el edil de Urbanismo, Antonio Fernández.
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