El PSOE de El Puerto ha planteado una serie de medidas que presentará al gobierno local para mejorar y agilizar el pago de las ayudas sociales al alquiler, “que vienen sufriendo reiterados retrasos, el más reciente de hasta 5 meses”. Como señala Ángel González “estamos ante un problema estructural con graves consecuencias tanto para los beneficiarios de las ayudas como para los propietarios de las viviendas, por lo que es urgente y necesario atajar ya el problema”.
El portavoz y secretario local del PSOE asegura que “no hay día que no vengan a buscarme afectados desesperados, tanto beneficiarios como propietarios, ante los reiterados y considerables retrasos del gobierno de Germán Beardo en el pago de estas ayudas sociales”, y subraya que “el último retraso supera ya los 5 meses”.
Ante esta situación, el líder de la oposición señala que “los políticos debemos estar para escuchar a la ciudadanía y convertir sus demandas en soluciones, estamos para mejorar la calidad de vida de las personas, y más quienes tienen el privilegio de gobernar, porque son los que tienen las herramientas para hacer posibles esas soluciones”.
La iniciativa del PSOE surge “tras las numerosas y constantes quejas recibidas, siendo la gota que colmó el vaso una carta recibida recientemente por Ángel González, donde se manifestaba el sufrimiento de muchas familias debido al mal funcionamiento de las políticas de Bienestar Social, cuya concejala Carmen Lara y el propio alcalde Germán Beardo, están permitiendo y perpetuando sin poner solución”.
La propuesta, que ha sido estudiada por la ejecutiva municipal socialista, pasaría por un cambio en la Ordenanza que regula las ayudas económicas, permitiendo, por un lado, pagos semestrales en vez de mensuales, “lo que supondría agilizar los expedientes y no depender mensualmente de que se puedan tramitar”, ya que como explica González “de esta forma, solo se tramitaría la subvención dos veces al año, lo que eliminaría burocracia y esperas”.
Por otro lado, desde el PSOE se propone incluir un protocolo a través del cual las ayudas sean abonadas directamente al propietario de la vivienda, “siendo así el propio Ayuntamiento el garante de los pagos, aportando confianza a los propietarios y dándoles la seguridad de que las ayudas no serán usadas para otros fines”.
