Nos hemos enterado que ahí fuera hay una buena movida y la verdad es que no nos aclaramos por mucha intensidad que le demos al tarro. Según lo que nos cuentan, es como si el mundo se hubiera vuelto loco y la gente cuerda se hubiera empeñado en darle todas las vueltas posibles a los calcetines de la existencia. Los presos más peligrosos salen del talego y se van sonriendo a sus respectivas casas como si aquí no hubiera pasado nada; los estadísticos calculan fríamente que los robos con fuerza en las viviendas han descendido un 16,22 %; los perros quieren irse a la playa de Camposoto y no sabemos si querrán también un sitio en los aparcamientos tal como está la cosa; los del IBI aseguran que no va a subir un 60%, sino solamente un 10%, como si un 10% fuera calderilla,...¿Qué pasa ahí fuera? Es para cortarse las venas una a una. Los locos nos hemos tirado un montón de días haciéndonos tantas preguntas, que no damos abasto.
Si a los asesinos en serie los dejan pasearse por la calle, ¿por qué no nos dejan también a los locos echar aunque sea una canita al aire? Nosotros somos menos peligrosos que esa gentuza y el único daño que hacemos es decir pamplinas que no se entienden. Y yo, que estoy loco, pero que no soy tonto, me pregunto: ¿ahora no es para correr a gorrazos por toda la calle Real al que inventó eso de la doctrina Parot? Con la cantidad de juristas,
jurados, abogados, jueces, procuradores, tribunales…que habitan en este increíble país ¿ninguno se dio cuenta de que esa doctrina hacía aguas por todos lados? ¿A ninguno se le pasó por la imaginación que esto podría ocurrir? ¿Ninguno, a partir de lo que ha sentenciado Europa, ha dimitido de sus responsabilidades dejando paso a otros que sepan más de derecho y menos de doctrinas?
Si al violador de los ascensores lo han dejado suelto, qué hará mi amigo el loco de la tercera planta que no tiene más remedio que cogerlo? ¿Se arriesga a que se lo cepillen? Si los asesinos en serie ya están volando libres, ¿estaremos nosotros en la macabra lista de los elegidos para la gloria por estos señores? Con nuestra lógica de locos pensamos que todo cambiaría si a un magistrado de esos que han derrumbado la Parot le violaran mañana a una de sus hijas en cualquier ascensor de Europa. Y sin embargo dicen que los robos con fuerza han descendido y no sabemos si ha sido también en ascensor. ¿Alguien lo entiende?
Por otra parte, si los perros se bañan y juegan a la pelota en la playa, ¿a qué se va a dedicar el dominguero que hasta ahora se conformaba con echar el ratito tranquilamente en la arena? ¿Habrá bozales suficientes para controlar la cosa? ¿Nos pondremos el bañador de caca hasta las trancas sin comerlo ni beberlo, que es lo que pasa ya en muchas aceras y calles de La Isla? Y ¿qué me dicen del IBI? ¿Sube o no sube? Porque, si sube un 10%, es que sube, digo yo. Y un 10% no es una tontería, porque los sueldos están más quietos que la defensa del San Fernando. Sería más fácil afirmar que el IBI va a subir una barbaridad, porque no hay más remedio. Y desde luego, a la vista de lo que uno ve, hay otros remedios que no se llevan a la práctica, porque afectan directamente a los que propician las subidas. En fin, qué les voy a contar que ustedes no sepan. Sin embargo hay dos cosas claras: una es que al paso que vamos se va a estar más seguro dentro de la cárcel que fuera; y la otra es que al cañaílla que le ha tocado 1,7 millones de euros se le han acabado la mayor parte de los problemas. Pero que no se fíe, que Montoso lo espera a la vuelta de la esquina.
