A veces me pregunto si los miembros de la corporación municipal pasean por las calles, van de compras al mercado, conocen los comercios, hablan con la gente o, simplemente, habitan esperando que a final de mes le ingresen la paga que tan generosamente les hemos conseguido en las urnas.
El Puerto de Santa María no se merece el abandono en que se encuentra; es necesario patear sus calles y ver el estado ruinoso de muchos edificios, incluso de propiedad municipal, y los numerosos comercios cerrados, falta de iluminación, puestos vacíos en el mercado local, calles y aceras sucias de excrementos y un largo etcétera a la vista de todos los portuenses y cuantos nos visitan.
Pongamos remedio, por favor, y seamos más prácticos llevando a los plenos asuntos de interés para todos y no propuestas que solo interesan a algunos, como por ejemplo llamar a una rotonda “Víctimas del franquismo”. Supongo que a otra le llamarán “La de las iglesias y conventos quemados”.
No removamos más la mierda que ya han pasado 80 años.
Otra de las propuestas es reflotar el Vapor, una idea maravillosa que ya pudieron poner en práctica durante los muchos años que han estado gobernando. En cuanto a las viviendas vacías y edificios abandonados, ya se promulgó una ley para que, a partir de los 10 años, puedan ser expropiados; háganlo y sáquenlo después a subasta, serán muchos los empresarios y particulares que acudan.
Por último, cabría recordar que las plusvalías van en función de los valores catastrales de los inmuebles, y esos son los que hay que actualizar. Así pues, señores y señoras a trabajar por El Puerto de Santa María y a dejarnos de chorradas.
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