Los portavoces de la Oposición se han apresurado a criticar duramente la propuesta de subida en 10 céntimos del billete univiaje de Tussam, sin más argumento que vincularla al pacto presupuestario para 2020 del PSOE con la izquierda que ellos tachan de “radical” o “populista”. Las críticas del portavoz de Cs, Álvaro Pimentel, se producen después de sus peticiones de nuevas líneas de autobús (como otra rápida a Los Bermejales y Bellavista) o de ampliación de existentes (por ejemplo, para conectar con Lagoh), sin reparar en que, como ha dicho el alcalde, esas ampliaciones y nuevos itinerarios requieren más personal y más combustible; en definitiva, más gasto, que obligan a adecuar los costes del servicio a la tarifa.
Hay que tener en cuenta además que el año pasado se prolongó la línea 37 hasta Fuente del Rey, se creó la nueva línea Norte a Pino Montano, se compraron 43 nuevos autobuses y se aprobó la tarjeta infantil, con lo cual son ya más de 110.000 los sevillanos que viajan gratis merced a los casi 13 millones en subvenciones municipales. Ampliar, mejorar y bonificar bonobuses tiene un coste, que se va a sostener con tan sólo un millón más que se recaudaría de subir el billete que menos usan los sevillanos y más los turistas. Las tarifas de Tussam no se modifican desde hace seis años, por lo que no parece que haya que rasgarse las vestiduras por esta mínima subida de diez céntimos.
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