La situación vuelve a repetirse en el sector servicios, donde ha aumentado el paro en el último mes, y ya clama al cielo. Los sindicatos, principalmente UGT ya alertó después de la Semana Santa que era incomprensible que subiera el desempleo en ese sector, cuando debería haber sido uno de los que tirara de la bajada del paro. Manuel Salazar lo dijo claro: “No es lógico”. Ahora, cuando se han conocido los datos del mes de mayo, con todas las comuniones de por medio, más de mil solo en la capital, los datos vuelven a señalar nuevamente al sector servicios como el único que no baja y los sindicatos apuntan ya sin ambages a un claro fraude, sobre todo en la hostelería. Estamos ante una verdad a gritos que todo el mundo conoce y ve en la calle, que los empresarios de la hostelería, en un porcentaje alto, no dan de alta a los trabajadores o lo hacen por muchas menos horas de las trabajadas, porque la peor precariedad laboral es aquella que te obliga a trabajar sin estar dado de alta, y eso, no solo en esta ciudad, sino en todo el país, es aún una práctica común en sectores como la hostelería. Volvemos a preguntarnos: ¿Dónde están los inspectores de trabajo? La gravedad de la situación, con datos como los reflejados en las estadísticas del paro de los últimos meses, debería hacer saltar todas las alarmas.
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