Desde la red

El poder del aficionado

Cada vez es más difícil escribir sobre un Recreativo que, por desgracia, está minando la esperanza de muchos seguidores

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Cada vez es más difícil escribir sobre un Recreativo que, por desgracia, y aunque a veces es temporal porque el aficionado recreativista siempre se motiva, está minando la esperanza de muchos seguidores. Siempre diré que esta afición es la mejor del mundo porque el simple hecho de aguantar esta racha y seguir con ganas de ir al campo nos hace de otra pasta. Me río yo de aficionados del Madrid que hablan de crisis, o del Valencia cuando dicen “lo que hemos sufrido en otros años”. Ay, si nos conocieran, si se pudieran poner en nuestra piel.

La desmotivación con la que luchamos cada semana no es sólo deportiva. Diría que la parte en la que rueda el balón tiene que ver con la inmediatez, pero no con el fondo. Es decir, un mal año deportivo es hasta normal tenerlo, haciendo excepciones con temporadas que lo habitual sea ganar. Pero bueno, si el año es malo, pues siempre queda pensar en nuevo plazo de fichajes, en otra temporada, en nuevos proyectos…

Eso aquí es imposible. Vamos al día a día y esperando con más fiabilidad una noticia negativa que una positiva. Lo de las deudas del Recre está claro que es una cruz que nos dejó el peor presidente de la historia del club, Pablo Comas, y que es un marrón difícil de quitarse. Pero igual que en aquellos tiempos exigíamos a pleno pulmón el “Comas paga ya” (además de

que se largara), esa exigencia debe ser similar ahora mismo. Necesitamos que el Ayuntamiento, propietario del club, nos indique alguna lógica real sobre sus actuaciones. Y es que el embargo estaba previsto para septiembre pagarlo y se tenía casi claro, pero se dieron dos meses más, noviembre, como bien marcaba la fecha de “pagar los carnets”. Hoy en mitad de enero esto sigue su vorágine hacia ningún lado, al final nos ponemos nerviosos, no sabemos por dónde escapar y nos quitamos la tensión echándonos mierda los aficionados entre nosotros, como si tuviéramos alguna remota opción de sanar al club económicamente (otra vez).

Por eso me gustaría que Gabriel Cruz hablara de algunas cosas: ¿dónde está el bloqueo? ¿En conseguir dinero? ¡Díganos a quién debemos presionar con manifestaciones para dejar claro que el Recreativo es importante en Huelva! Allí estaremos. Confíen en nosotros. Pero no nos tomen como maniquíes, por favor. Piensen que de media, somos hasta medio inteligentes para comprender las cosas, exceptuando algunos casos. Y me gustaría hacer extensiva esta presión a los que más se la juegan: los directivos del club. Que cuenten con nosotros, que presionamos donde hay que hacerlo. Somos la mejor arma del Recreativo. No nos oxiden, por favor. Quizás así, podamos seguir con dignidad.

 

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