En el Recreativo nunca son tiempos completamente felices. Al menos desde que Marcelino nos dejara en la mejor posición liguera de la historia y tras conquistar la temporada anterior el campeonato de Segunda División, siempre hemos sufrido más de la cuenta. Aunque el final es agónico, salimos adelante, y la dificultad está creciendo temporada a temporada.
No es ahora diferente. En el plano deportivo Ángel López se ha estrenado con fuerzas, rompiendo en su debut con las voces críticas y consiguiendo un equipo más conjuntado en el campo con un plus de solidaridad y esfuerzo. Este domingo debe refrendar el resultado ante el Mérida contra el filial del Córdoba. Un partido que, como ya es costumbre, será presenciado por muchos seguidores albiazules. Y es que la hora (11.30 de la mañana) ha sido una queja generalizada, pero al final siempre se acaba acudiendo al evento por difícil que lo ponga. Ellos podrán ver en directo si la progresión del equipo, con Ángel López al mando, sigue siendo favorable o fue cosa de un día. Deseamos que sea lo primero, porque plantilla hay, calidad técnica también y la actitud es irreprochable. Quizás faltaba creerse más un conjunto de jugadores que un grupo de individualidades, y ahí encontrará el acierto.
Y es que lo deportivo es la cara de la moneda. ¿Quién no se ilusiona después de una victoria tras un cambio? Y ahora viene la cruz. Hablando de cruz, esperamos a Gabriel Cruz. Pensé que el acuerdo con Hacienda (llamemos acuerdo a pagar lo que hay que pagar para quitarnos el embargo) se haría en septiembre. Ya estamos acostumbrados a no cumplir las fechas, así que dejamos correr el tiempo. Pero la preocupación existe, y es lógica y debemos compartirla: estamos en noviembre, una fecha holgada que se dio para pagar los carnets para poder afrontar el pago a Hacienda con tiempo de sobra… y nos hace falta más tiempo. Hay poco que decir, son cosas internas y no sé qué fichas está moviendo Gabriel Cruz para poder pagar: si lo hace el propio Ayuntamiento, si es a través de terceros, si hay venta encubierta o si seguimos jugando al Euromillón (o la ruleta rusa). Lo cierto es que una temporada en la que los directivos siguen rindiendo (me falta el enlace de la afición, ¿habéis cedido a presiones de “independentistas albiazules minoritarios”?), hay plantilla aunque los resultados tarden en llegar y tenemos once mil socios… era un año para pegar el colofón de quitarnos el embargo. ¿Se hará? Puede, el Recre siempre sigue adelante. Pero el nervio tranquilo no lo vamos a perder los aficionados después de tantos años de sufrimiento “mortal”.
De momento, a ganar el domingo. Y esperar noticias cuanto antes. ¡Seguimos!
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