El esloveno Luka Doncic vivió otra jornada envuelta en el triunfo personal, la admiración por parte del equipo rival, en este caso de los Warriors de Golden State, los actuales campeones de liga, y la frustración de una derrota más de su equipo, los Mavericks de Dallas, además de una contusión en la cadera izquierda.
Todo eso generó Doncic durante el partido que los Mavericks disputaron la pasada noche en el Oracle Arena de Oakland, y que acabó con derrota de Dallas por 120-116 ante los Warriors.
Encajar los Mavericks la quinta derrota consecutiva no impidió a Doncic ser la gran estrella en el primer cuarto del partido en el que dominó y mostró una madurez impensable para un jugador novato, que llega del baloncesto español y que se enfrentaba a figuras como Kevin Durant, Stephen Curry y Draymond Green.
Doncic terminó el primer cuarto con 14 puntos, la mejor anotación en un primer cuarto de partido contra los Warriors en la era del entrenador Steve Kerr. En el segundo cuarto, Doncic falló los tres tiros de campo que hizo.
Pero por lo que vieron en el primero, todas las figuras de los Warriors, al concluir el partido, fueron unánimes en la alabanza del gran talento, clase y valentía que posee Doncic, quien lo acabó con 19 puntos en los 30 minutos que disputó.
El exjugador del Real Madrid anotó 7 de 15 tiros de campo, incluidos 3 de 6 triples, y 2-4 desde la línea de personal, además de capturar tres rebotes, dar cinco asistencias, recuperar dos balones, perder uno, poner un tapón y hacer dos faltas.
Doncic también protagonizó una penetración a canasta que lo llevó a chocar contra una silla de los espectadores de la primera fila de la pista y se golpeó la cadera izquierda.
Después del partido, Doncic le regaló su camiseta firmada a Eric Kocher, un niño de 10 años, sobre quien cayó durante la jugada en la que se golpeó.
Ya luego en el vestuario, Doncic, de 19 años, mostró cierta dificultad al caminar a través del vestuario de los Mavericks, con una leve cojera, y una bolsa de hielo colocada en la cadera izquierda.
"Creo que es solo un golpe", declaró Doncic a los periodistas. "Mañana veremos cómo es y si puedo jugar".
El entrenador de los Mavericks, Rick Carlisle, se mostró optimista y declaró que no creía que la lesión fuera grave, pero podrían tener mayor conocimiento del alcance de la misma antes del duelo frente a los Trail Blazers esta noche.
Doncic ya se perdió un partido a principios de esta temporada con un tirón muscular en la cadera derecha.
Mientras, los jugadores de los Warriors, encabezados por Green admitieron que el exjugador del Real Madrid era ya un "problema" para los equipos rivales.
Además de alabar el detalle que Doncic tuvo el niño, a quien golpeó cuando intentaba una penetración a canasta y se fue contra las sillas de los espectadores, Green dijo que la presencia del jugador esloveno iba a generar muchos problemas a los rivales.
"Pero va a ser realmente bueno por mucho tiempo. Es emocionante de ver. Ha levantado esa franquicia (Dallas Mavericks)", declaró Green.
Curry se mantuvo en la misma línea que su compañero y alabó el talento y la gran confianza que posee Doncic en sus acciones.
"Sabe lo que hace en el campo, y aunque es un novato ha encontrado la manera de imponer su juego la mayoría de las noches", valoró Curry. "Será bueno verlo desarrollarse en esta liga".
Los elogios de las estrellas de los Warriors no fueron los primeros que Doncic ha obtenido durante la semana pasada.
El entrenador de los Kings de Sacramento, Dave Joeger, quien podría tenerlo ahora en la plantilla si el equipo lo hubiesen seleccionado con el número dos en el pasado sorteo universitario, destacó que Doncic no tiene límite para crecer como jugador.
Por su parte, LeBron James, el ídolo de Doncic desde que era niño, destacó que el esloveno estaba en la lista de profesionales con los que sueña jugar.
El propietario de los Mavericks, Mark Cuban, también destacó que todos los jugadores deberían emular el camino de Doncic para jugar profesionalmente en la EuroLiga antes de llegar a la NBA.
Sin embargo, como equipo, los Mavericks, ya tienen en su haber una racha de cinco derrotas consecutivas y marca perdedora de 15-16, que los deja fuera de los ocho primeros puestos con derecho a los playoffs en la Conferencia Oeste.
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