El crecimiento que ha tenido en los últimos años el nuevo deporte de moda en Europa (el pádel) ha producido un efecto totalmente contrario en un deporte que solía tener mucha mayor cantidad de importancia en los últimos años como es el tenis, tanto es así que mientras las licencias de pádel aumentan en porcentajes que rondan el 10%, las de tenis han comenzado a reducirse en cifras que se acercan al 5%.
Pero la verdad es que este crecimiento del pádel y decrecimiento del tenis no es ninguna sorpresa ni tenemos porque asustarnos o extrañarnos, el pádel es un deporte en crecimiento por el simple hecho de que tiene las razones para serlo: no necesitamos ser atletas para practicar este deporte, es decir, cualquier persona sin importar su peso, forma física o edad puede disfrutar y comenzar en este deporte, además es un deporte que no necesita gastar cantidades exuberantes de dinero para practicarlo, solamente necesitamos unas zapatillas y encontrar un buen descuento en palas de pádel para poder jugar. Esto unido con lo divertido, fácil de jugar e interesante que es del deporte le convierte justamente en lo que es: el deporte de moda en toda Europa.
Las cifras son muy claras: si el pádel sigue en el camino que va en poco tiempo desbancara en federados inscritos al tenis y luego de lograr eso solo le queda un corto camino para convertirse en el deporte de raqueta más importante de toda Europa. El tenis tiene historia, eso es cierto, pero los altos costos para practicar ese deporte hacen que quienes le tienen amor a la raqueta busquen opciones más económicas y que le ofrezcan las mismas sensaciones y ahí es donde se encuentran con el pádel.
Beneficios de practicar pádel para nuestra salud
Otra de las razones por las cuales muchas personas alrededor de Europa deciden practicar pádel es porque este deporte tiene muchos beneficios para nuestra salud, entre ellos podemos encontrar los siguientes:
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Como todo deporte, el pádel es sumamente beneficioso para nuestro corazón, puede evitar que tengamos enfermedades cardiovasculares, infartos y otro tipo de padecimientos. También practicar deporte refuerza nuestros huesos y músculos por lo cual nos hacemos más resistentes a enfermedades como la osteoporosis.
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Jugar pádel libera endorfinas, hormonas que tienen la capacidad de otorgarnos una sensación placentera que puede ser relacionada con la felicidad, en pocas palabras practicar pádel puede hacernos olvidar de los problemas del día a día y sentirnos un poco más alegres.
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El pádel no es un deporte tan exigente físicamente, por lo tanto puede ser practicado por personas de edades bastante altas y cualquier persona que lo practique tendrá menos posibilidades de lesionarse que en cualquier otro deporte.
Estas y otras razones más son las que han llevado al pádel a pelearle la cima de los deportes de raqueta al tenis y es que si alguna vez en nuestra vida jugamos pádel nos podremos dar cuenta de que ciertamente es un deporte muy bueno para practicar y que nos hace querer seguir jugando por mucho tiempo.
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