El alcalde de Río de Janeiro, Eduardo Paes, dijo que las autoridades brasileñas han estado desde siempre preocupadas con posibles actos terroristas durante los Juegos Olímpicos de 2016, especialmente ahora tras los atentados de París, pero alegó en que confía en las medidas adoptadas por el Gobierno.
"Es obvio que cualquier evento en el mundo, hasta los Olímpicos en Río, corren ese riesgo, pero creo que el Gobierno brasileño ya demostró en el Mundial de (fútbol Brasil) 2014 y lo va a volver a demostrar en los Juegos Olímpicos que sabe lidiar con el asunto", dijo Paes en declaraciones que concedió en el acto de presentación de una nueva instalación que será usada en los Olímpicos Río 2016.
El mandatario municipal afirmó que el Gobierno brasileño tiene acuerdos de cooperación con los servicios de inteligencia de todo el mundo que fueron aprovechados durante el Mundial y que seguirán funcionando hasta los Olímpicos.
"Preocupación siempre hubo y tiene que haber siempre, incluso porque París no fue el blanco. El mundo civilizado fue el blanco de esos atentados", afirmó Paes durante la presentación del Centro de Hockey para Río 2016.
El alcalde dijo que los organizadores de los Juegos tienen que estar siempre alerta y preocupados con cualquier amenaza, incluso porque no es algo que puede ocurrir tan sólo en París sino en cualquier lugar del mundo.
"Vamos a tomar más cuidados con la seguridad en los Juegos Olímpicos, pero las cosas van a salir bien", afirmó el gobernante municipal, quien aclaró que el asunto de seguridad huye de su responsabilidad por tratarse de una responsabilidad del gobierno federal de Brasil y del gobierno regional.
Agregó que incluso Río de Janeiro tiene que prevenirse de acciones de personas que utilizan la religión como disculpa para cometer barbaridades.
"Fue un ataque de la barbarie contra la civilización", aseguró Paes al indicar que el blanco de los terroristas no era exclusivamente París.
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