Juan Manuel Fernández Cordero se ha quedado este año con la Vara de la Virgen del Carmen de Cartaya, por la que pujó 4.000 euros en el tradicional acto que tuvo lugar en la mañana del Domingo de Resurrección a las puertas de la Parroquia de San Pedro Apóstol de la localidad costera.
La Puja de la Vara tuvo lugar un año más tras la procesión de la Patrona de los Marineros por las calles del centro, con la que Cartaya ha cerrado su Semana Santa, y que congregó a numerosos devotos a lo largo de su breve pero intenso recorrido por la plaza Redonda y las calles Nueva, Otero y Alcalde Guillermo Pérez.
La Virgen del Carmen fue acompañada en su procesionar por la Banda del Ateneo Musical Cartayero y a su paso, un año más, las calles fueron cubiertas con la tradicional alfombra de romero. Uno de los momentos más coloristas del recorrido fue cuando el grupo flamenco local ‘Entre Pinos y Marismas’ interpretó en el templete de la plaza Redonda, al paso de la Virgen, unas sevillanas compuestas en homenaje a la Patrona de los Marineros y que fueron muy aplaudidas. En agradecimiento, el presidente de la Hermandad de Nuestra Señora del Carmen de Cartaya, José Hurtado, hizo entrega a cada uno de sus cuatro componentes la medalla de la Hermandad.
Como cada año, la imagen de la Virgen del Carmen entró por las puertas de la Iglesia de San Pedro a las 11.00 horas bajo los sones de la Salve Marinera que en su honor interpretó la banda de música de la localidad.
Poco después, la Hermandad de Consolación llevó a cabo un año más la recientemente recuperada tradición de los Aleluyas. Así, numerosos niños partieron desde la parroquia cartayera haciendo sonar distintos instrumentos sonoros en una comitiva que recorrió la plaza Redonda y las calles De la Plaza y Santa María de Consolación, hasta llegar a la ermita del mismo nombre para, ante la Virgen de Consolación anunciar la Resurrección del Señor.
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