El Auto del Descendimiento de Cartaya centra el Viernes Santo en la Costa

Si duda, el Auto Sacramental del Descendimiento de la imagen articulada de Cristo de la Cruz en el altar mayor de la parroquia de San Pedro Apóstol de Cartaya ha sido un año más el acto más significativo del Viernes Santo onubense

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  • Descendimiento Cartaya (2015) -

Si duda, el Auto Sacramental del Descendimiento de la imagen articulada de Cristo de la Cruz en el altar mayor de la parroquia de San Pedro Apóstol de Cartaya ha sido un año más el acto más significativo del Viernes Santo onubense. Una tradición que protagonizan los denominados Santos Varones y que se conserva en muy pocos lugares de España, lo que la ha convertido en toda una seña de identidad no sólo de la Semana Santa cartayera, sino de toda la provincia.

La secuencia del Auto se inicia cuando los Santos Varones, siguiendo la dramática narración del orador, descorren el velo rojo que cubre el altar mayor de la Parroquia de San Pedro Apóstol, para posteriormente desclavar y descender la imagen del Cristo Articulado que pende de la Cruz. Posteriormente, los Santos Varones presentan la Imagen del Cristo Yacente ante su Madre, y la exponen en tradicional besapiés a la adoración de los fieles antes de introducirla en la urna de cristal en la que posteriormente volvió a procesionar en el más absoluto silencio.

Entre las particularidades de la Hermandad Sacramental del Santo Entierro de Cristo, encargada del Auto del Descendimiento, destaca la de los Santos Varones, de los que resulta de gran interés su inusual vestimenta, de origen desconocido, muy poco común en la Semana Santa y caracterizada por túnica blanca, tocado plisado y fajín negro.

Esta cofradía está compuesta por un solo paso cuya urna, de estilo clásico y procedente de un convento de clausura sevillano, es uno de sus elementos más destacados. La actual imagen yacente, de 1944 realizada en los talleres de José Alarcón, reemplazó a la destruida en la Guerra Civil, manteniendo de aquélla su carácter articulado para poder escenificar el Auto del Descendimiento. El paso tiene cuatro ángeles de talla, del artista local Fernando Álvarez Galán.

Se trata de una de las hermandades más antiguas de Cartaya y todo apunta a que proviene de la fusión de las antiguas cofradías del Sepulcro y del Santo Sacramento. La primera referencia conocida de la Sacramental data de 1599, mientras que la del Sepulcro ya aparece citada en 1673. En 1952 ambas se fusionan. Hasta 1985 acompañaba el procesionar del Cristo Yacente la Virgen de los Dolores, aunque actualmente procesiona solo.

El Auto del Descendimiento fue una costumbre muy habitual desde el siglo XIV en todo el Reino de Castilla, aunque se escenificaba en prados y descampados a las afueras de las poblaciones. Este antiguo rito contemplaba normalmente la crucifixión, muerte y bajada de Cristo de la Cruz, para entregarlo a su Madre. Todo se acompañaba por el denominado Sermón del Descendimiento. Actualmente, en los contados lugares donde esta tradición se ha conservado, un par de municipios en todo el territorio nacional, ha cambiado la escenografía, que ha pasado al interior de los templos, siendo además el de Cartaya uno en los que con más detalle se ha conservado.

VIERNES SANTO AYAMONTE: DOS SANTOS ENTIERROS

Ayamonte ha vuelto a presumir esta Semana Santa de ser la única localidad de nuestro país donde salen a la calle dos estaciones de penitencia con el misterio del Santo Entierro de Cristo.

Así, numerosos fieles se dieron cita en primer lugar en la parroquia de las Angustias para vivir el riguroso luto que caracteriza la estación de penitencia de la Pontificia, Real e Ilustre Hermandad Sacramental del Santo Entierro, Descendimiento de Cruz y Nuestra Señora del Mayor Dolor (Mayor Dolor), que sacó a la calle sus tres pasos: uno con el misterio del Descendimiento de la Cruz, con talla de José Planes Peñalver; otro con el Cristo Yacente, del insigne escultor local Antonio León Ortega; y finalmente el de Nuestra Señora del Mayor Dolor, de Salvador Castillejos. La Hermandad del Descendimiento fue fundada en 1894.

El otro misterio del Santo Entierro de Cristo de la ciudad fronteriza, el que saca en estación de penitencia la Muy Antigua, Real e Ilustre Hermandad Franciscana de Penitencia de la Vera Cruz, Santo Entierro de Cristo, y María Santísima en su Soledad (La Soledad), partió desde el templo de San Francisco, donde cientos de hermanos se dieron cita para disfrutar del desfile procesional de sus tres pasos: el del Cristo de la Vera Cruz; el del Santo Entierro de Cristo; y el de María Santísima en su Soledad.

Se trata de la Cofradía de Vera Cruz más antigua de la provincia de Huelva. La primitiva imagen del Cristo de Vera Cruz que existía desde la fundación de la Hermandad era de autor anónimo, aunque Antonio León Ortega la reconstruyó en 1941. La imagen del Cristo Yacente podría datar del siglo XV, y se atribuye a Ocampo, aunque también el escultor local León Ortega la reconstruyó en 1937. Finalmente, Antonio Castillo Lastrucci restauró en 1937 la primitiva imagen de la Virgen de la Soledad, originaria del año 1550.

VIERNES SANTO ISLA CRISTINA: DOS PROCESIONES

Isla Cristina disfrutó de sus dos desfiles procesionales del Viernes Santo y en primer lugar la Real, Ilustre y Fervorosa Hermandad Sacramental y Cofradía de Nazarenos del Santísimo Cristo de la Vida y Nuestra Señora de los Dolores, más conocida como ‘Los 33’, con sede canónica en la parroquia de Nuestra Señora de los Dolores, desde la que sacó sus dos pasos a la calle. Los puntos más interesantes de su recorrido, tanto desde el punto de vista estético como emotivo y religioso, volvieron a ser su particular salida, su entrada, y su transitar por Baja, carrera oficial, Manuel Siurot, Del Prado y Gran Vía, además de la reverencia ante la parroquia del Gran Poder. El paso del Santo Entierro es la ‘joya’ de la Semana Santa isleña.

Por otra parte, la Hermandad de la Vera Cruz y Cofradía del Santísimo Cristo del Amor y Nuestra Señora de la Piedad y Santo Entierro de Nuestro Señor Jesucristo (Vera Cruz), sacó sus dos pasos desde la sede de su casa de hermandad (ermita de Nuestra Señora de los Ángeles). Los puntos más interesantes de su itinerario volvieron a ser su salida y entrada, y su paso por Santo Domingo de Guzmán.

VIERNES SANTO LEPE

Al igual que en Isla Cristina y Ayamonte, dos procesiones marcaron el Viernes Santo en Lepe. Por una parte la más madrugadora de toda la Costa Occidental en este día, la Antigua, Ilustre y Fervorosa Hermandad de Nuestro Padre Jesús Nazareno, María Santísima de las Angustias, Jesús en su Entrada Triunfal en Jerusalén, Nuestro Señor Cautivo y Nuestra Señora de la Paz, cuyos dos pasos salieron a las nueve de la mañana desde la parroquia Santo Domingo de Guzmán, para recogerse casi seis horas más tarde.

Ya a última hora de la tarde le tocó el turno a la Muy Ilustre y Muy Antigua Hermandad Sacramental y Cofradía del Santo Entierro de Cristo y María Santísima de la Soledad, cuyos dos pasos salieron de la capilla de las Monjas.

VIERNES SANTO PUNTA UMBRÍA

En Punta Umbría realizó su estación de penitencia desde la capilla de Lourdes la Hermandad del Santo Cristo del Mar y María Santísima de los Dolores, que sacó a la calle dos pasos, el de misterio con el Crucificado Santo Cristo del Mar, y el de palio de María Santísima de los Dolores.

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