Los grupos del Ayuntamiento de Córdoba --PSOE, IU, PP, Ganemos, Cs y UCOR-- han aprobado este martes en el Pleno Ordinario una declaración institucional sobre el reconocimiento de la singularidad del salmorejo cordobés, con el fin de reforzar la identidad de este producto y que a su vez pueda obtener la nominación como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad por la Unesco.
En dicha propuesta han destacado que es "un plato emblemático de la ciudad de Córdoba y su provincia", de manera que "no se ha quedado en un plato con tradición e historia o un plato bien referenciado en los libros, sino que se ha convertido en verdadero emblema de la ciudad".
Además, han resaltado que "es un plato vigente y de gran aceptación por parte de la ciudadanía cordobesa", al tiempo que han mencionado que ha sido "objeto de estudio científico", siendo "uno de los platos mejor caracterizados y estudiados desde los puntos de vista histórico, gastronómico, sensorial y nutricional".
Igualmente, han valorado que la receta estandarizada, que aparece en la Calleja del Salmorejo Cordobés o la que la Cofradía Gastronómica del Salmorejo Cordobés publica en su web y en las actividades que realiza, ha sido "difundida por todo el mundo y traducida a más de 60 idiomas".
Dicha difusión ha permitido que "el salmorejo cordobés se haya convertido en un plato ofrecido en numerosos restaurantes andaluces, españoles e incluso de fuera del país", donde en muchos de los países "se reconoce el nombre del plato como 'Salmorejo', pero se identifica como 'Andaluz' o sin topónimo, si bien es también denominado y conocido como 'Salmorejo Cordobés'", por lo que consideran que "es una magnífica tarjeta de visita de la marca 'Córdoba' y/o 'Andalucía' por remotas tierras".
En relación a la caracterización nutricional, permite que "el salmorejo se encuentre perfectamente identificado por parte de los nutricionistas y gracias a su bajo poder calórico, pueda ser utilizado por cualquier tipo de individuo y en especial en dietas de adelgazamiento, siendo incluso factible rebajar su contenido calórico fácilmente, sin variar sustancialmente sus propiedades organolépticas". Aunque también se puede conseguir todo lo contrario, "formularse con un poder calórico muy superior, en caso de que el interés sea de aportar alimentos más calóricos y de fácil consumo para situaciones de desnutrición".
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