El cuadro del pintor barroco cordobés Antonio Acisco Palomino de Castro y Velasco, que representa una Inmaculada Concepción y que ha sido subastado en la casa internacional Sotheby's, ha alcanzado un precio de puja de los 10.080 dólares.
El óleo sobre lienzo de gran formato de uno de las más importantes autores de frescos de la segunda mitad del siglo XVII supera así las previsiones de la casa de subastas, que situaba en un máximo de 7.000 dólares la puja, y duplica el mínimo que esperaba alcanzar, que era de 5.000, según publica Sotheby's en su web.
El cuadro, que era propiedad hasta ayer de una colección particular de Miami (Estados Unidos), quintuplicó su precio en las últimas seis horas de puja.
La obra se encuentra "aparentemente todavía en su marco original" y podría proceder del encargo de alguna orden religiosa a Palomino ( nacido en Bujalance -Córdoba- en 1655 y fallecido Madrid en 1726), la principal fuente de sus trabajos, según Sotheby's.
La pintura, de 147 por 181,6 centímetros, guarda grandes similitudes con otra Inmaculada del pintor cordobés que se encuentra entre las trece que conserva el Museo Nacional del Prado, datada a principios del siglo XVIII.
De hecho, Palomino "ayudado por su taller pintó muchas Inmaculadas de este tipo", según dijo a EFE José María Palencia, asesor técnico del Museo Provincial de Bellas Artes de Córdoba.
A su juicio, "el cuadro parece copia del que, desde 2013 se exhibe en el Museo de Bellas Artes de Córdoba por depósito del Museo Nacional del Prado, que está firmado, y se sabe que perteneció a las colecciones reales".
Para Palencia, "parece de calidad y contiene fragmentos y detalles que luego serán repetidos en otras obras por el artista de Bujalance y sus seguidores, como, por ejemplo, los grupos de ángeles de ambos lados en la zona superior de la composición, que se repiten de manera idéntica en otra Inmaculada que fue del Colegio de los Jesuitas de Córdoba y se encuentra en la Real Academia de San Fernando desde la expulsión".
Palomino se formó primero en Córdoba bajo la dirección de Juan Valdés Leal y en Madrid en el círculo de Juan Carreño de Miranda y Claudio Coello, lo que le dio la oportunidad de aprender la técnica del fresco de la mano de Luca Giordano.
Entre las obras más destacadas de Palomino están su participación en las bóvedas de El Escorial y las del antiguo oratorio del Ayuntamiento de Madrid, las bóvedas de la iglesia de los Santos Juanes y de la basílica de Nuestra Señora de los Desamparados, en Valencia, el 'Triunfo de la Iglesia' para el coro de la iglesia de San Esteban, en Salamanca, y ocho lienzos para la capilla del cardenal Salazar y para el altar mayor de la Catedral de Córdoba.
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