En román paladino

El runrún

Se lanzan noticias falsas y rumores para influir en el público

Publicado: 09/12/2019 ·
18:57
· Actualizado: 10/12/2019 · 09:01
Publicidad AiPublicidad Ai
Autor

Rafael Román

Rafael Román es profesor universitario, miembro del PSOE, exconsejero de Cultura y expresidente de la Diputación de Cádiz

En román paladino

El autor aborda en su espacio todos los aspectos de la actualidad política tanto de España, Andalucía y la provincia de Cádiz.

VISITAR BLOG

Hoy comienza la ronda del rey con los partidos. Se lanzan noticias falsas y rumores para influir en el público  cuando interesa crear un estado  de opinión por motivos espurios.  Hay un tema que ha sido explotado por algunos.  El runrún  se gestó  antes pero la ocasión para darle publicidad ha sido el abrazo entre Pedro Sánchez y Pablo Iglesias mientras el rey volaba para Cuba. A raíz de esa coincidencia se ha pretendido poner en circulación dos    bulos. El primero, las malas relaciones entre el presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, y   el rey Felipe. El segundo, ha sido promovido  por el papel de anfitrión  en la sede de la Cumbre del Clima del presidente en lugar del rey. El rey recibió a los altos mandatarios -fundamentalmente jefes de Estado o de Gobierno- como corresponde  en el Palacio de Oriente. Tal como la  británica reina Isabel II ha hecho con los jefes de delegación en Londres , en Buckingham Palace, en la reciente Cumbre de la OTAN. El runrún era intencionado. Ha habido quienes han dejado por escrito que el presidente en funciones ha querido  -segundo bulo-  “ir de jefe de Estado”.  La Razón tituló: “Sánchez se erige en “jefe de Estado” en la Cumbre del Clima”.  El Español no se quedó atrás: “Frialdad y suspicacia entre Felipe VI y Pedro Sánchez” y “Las consultas de Felipe VI, descafeinadas al coincidir con las reuniones entre PSOE y ERC”. y así sucesivamente. 

Quizá cierta prensa añora la intromisión del rey en los asuntos políticos,  como en los tiempos de su bisabuelo Alfonso XIII.  Su venalidad en asuntos militares y su actitud complaciente con  la dictadura  de Miguel Primo de Rivera, entre otras cosas, le costó el trono. Una de las cualidades que pueden consolidar a la monarquía es justamente -además de la ejemplaridad - el ajustarse estrictamente a su papel constitucional. No hay mejor receta para la monarquía parlamentaria. Con  un parlamento muy fragmentado y de difícil gobernabilidad esa virtud se convierte en necesidad.

Dos notas. Primera. En su Manual de Resistencia Pedro Sánchez habla expresamente de su relación estrecha, de su complicidad y de la  confianza mutua entre él y el  monarca, frente a “los amantes de la cizaña”.  La segunda. Javier Cercas dijo hace poco ante el rey: “El verdadero dilema en España no es república o monarquía, sino mejor o peor democracia”.

 

Envía tu noticia a: participa@andaluciainformacion.es

TE RECOMENDAMOS

ÚNETE A NUESTRO BOLETÍN