El portavoz de la formación morada, Carlos Fernández, denuncia que existen en Chiclana, fuera de lo que son arterias principales, “muchas vías que revisten peligrosidad”, que “hay reivindicaciones históricas de la ciudadanía en cuanto al arreglo de diversas carreteras y no se les está escuchando”, y, sin embargo, “por otro lado vemos como se acometen obras en carreteras como la del Molino Viejo, que está junto a la playa, con dinero del Ayuntamiento, pero la obra de la carretera de la Rana Verde lleva dos años ralentizada porque se esperan fondos de la Junta para terminarla. Esta es una carretera de gran siniestralidad, con cunetas a baja altura, que han protagonizado numerosos accidentes, y tras una inversión de quince millones para sistemas generales las cunetas continúan igual”.
Fernández añade que “existen muchas vías que necesitan mejoras como la carretera de la Cañada de los Barrancos, que es una arteria importantísima y muy transitada”. Al respecto declara que “esta carretera no tiene alumbrado, no tiene acerado y el ancho de la vía no es el adecuado”, y prosigue diciendo que “en este caso los diferentes gobiernos de la Junta se culpan de pedir su deslinde, y ninguno lo ha acometido, para poder hacer las reformas necesarias para su optimización”. Para Fernández también “el tramo de la antigua N-340, desde Polanco hasta la estación del tranvía, se trata de una zona que tiene complicaciones”. La dificultad, según el portavoz, se encuentra en que “en ese tramo está la entrada de camiones más importante de Pelagatos, en la que tan solo hay una farola, con señales de tráfico, en todo el trazado, prácticamente indescifrables porque están descoloridas por el sol. Se trata de un tramo oscuro, lleno de baches y de grietas. En resumen, otra arteria de Chiclana, que además es una vía de entrada a la ciudad que da una imagen tétrica del estado de mantenimiento”.
Según declara Fernández, “existen muchos otros puntos negros en nuestra ciudad que no se están teniendo en cuenta, mayormente porque en muchos casos en Ayuntamiento dice que es competencia de la Junta, pero la Junta tampoco hace frente a sus responsabilidades, sin embargo vemos como muchas obras se hacen a cuenta del Ayuntamiento sin ser de su competencia, como en el caso del Molino Viejo”. Desde la formación morada denuncian que “seguimos viendo cómo juegan a echar balones fuera ambas administraciones pero no se ofrecen soluciones”, en palabras de Fernández “no hay una estrategia verdadera de transformar la ciudad en un lugar más accesible y más humano para todas las personas de la ciudad sin distinción”.
El portavoz concluye añadiendo que “seguimos viendo que persisten promesas sin cumplir y obras sin terminar, como por ejemplo es el caso de la cubierta prometida para la Estación de Autobuses o la puesta en marcha del tranvía. Y Chiclana siempre sigue esperando”.
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