¿No os pasa que esperáis algo mucho y llegado el momento es una decepción? Tanto para tan poco. Eso es lo que se me ha venido a la mente con las bodas de las últimas semanas, en especial con la de Sergio Ramos y Pilar Rubio. Para mí fue un desfile de mal gusto encabezado por la novia. Pilar Rubio, de marcado estilo rockero, nos sorprendió con mezcla de estilos: rl ramo me pareció una broma de mal gusto de flores típicas funerarias -para más inri en color negro-, el peinado de inspiración avatar no casaba con un vestido de alta costura, los pendientes recargados hasta decir basta. Los invitados fueron pocos los que acertaron: quizás tanta exigencia en el dress code por parte de los novios hiciera un flaco favor.
Estas semanas han sido de bodas. También han contraído matrimonio la colaboradora de TV Belén Esteban, la influencer María Pombo y la soprano Ainhoa Arteta. Aunque las comparaciones son odiosas, las diferentes bodas coinciden por los invitados, que han tropezado estilísticamente.
-Boda Sergio Ramos y Pilar Rubio: Macarena Rodríguez, su recargado look a lo pollito pío no fue acertado. Joaquín jugador del Betis y su esposa fueron la pareja peor vestida: él con mocasines sin calcetines y ella un dos piezas de inspiración rockera.
-Boda Belén Esteban y Miguel: la colaboradora de realities Belén Rodríguez eligió un desfavorecedor look felino combinado con el color rojo. Carlota Corredera vistió un vestido largo que evocaba a Juego de Tronos dulcificado por el exceso floral del escote.
-Boda María Pombo y Pablo Castellano: Laura Matamoros arriesgó pero no ganó con un dos piezas de inspiración militar sexy de falda con abertura lateral y grandes botones dorados. La influencer -que no influencia- Dulceida volvió a decepcionar con un vestido rojo de gasa transparente de escote corazón que no dejó nada a la imaginación.
-Boda Ainhoa Arteta y Martín Urrea: la actriz Antonia San Juan eligió un vestido satinado de estampado abstracto con salones nude que se fundían con su tono de piel.
Hay muchos otros invitados que cayeron estrepitosamente, pero he de decir y resaltar que la novia top mejor vestida fue Ainhoa Arteta, mi enhorabuena. Hay que vestirse -no disfrazarse- para una boda y tener en cuenta tipo celebración, lugar y temática.
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