Instituciones Penitenciarias decretó este viernes el corte de las “comunicaciones especiales” entre los internos de diez cárceles andaluzas, ante el aumento de casos de Covid-19 detectado entre la población reclusa. Uno de los centros pemitenciarios afectados es el de Botafuegos, en Algeciras.
Según ha informado a Efe el sindicato ACAIP y ha confirmado de fuentes del Ministerio del Interior, se trata de la “suspensión de comunicaciones especiales”, de modo que se corta el contacto personal con familiares, así como íntimas y de convivencia, con lo que solo se permiten visitas a través de locutorios.
La medida afecta a las cárceles andaluzas de Sevilla II, en Morón de la Frontera, los dos centros de Málaga y las prisiones de Almería, Algeciras, Córdoba, Jaén, Granada, Ceuta y Melilla.
La Secretaría General de Instituciones Penitenciarias, según informa Interior, monitoriza diariamente la situación de la incidencia de la covid-19 en los centros de su competencia, y se ha decidido tomar estas medidas "tras el análisis, caso por caso, de la situación epidemiológica de las zonas en las que se encuentran”.
Solo en la cárcel de Morón de la Frontera (Sevilla) se han detectado 14 casos de COVID entre la población reclusa, sin que ningún funcionario esté afectado hasta el momento.
A día de hoy, dos módulos de esta prisión están en cuarentena y aún siguen rastreándose posibles contagios por este brote, con lo que, según Acaip, no se puede descartar la aparición de nuevos casos.
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