El alcalde, José Ignacio Landaluce, ha estado presente en el arranque de los trabajos para la limpieza de lodos del colector de la calle Jacinto Benavente, para conocer de primera mano en que condiciones se va a llevar a cabo y las dificultades que presenta, así como la planificación prevista para su ejecución. Ha estado acompañado de la teniente de alcalde delegada de Emalgesa, Eva Pajares, así como por los técnicos responsables de las obras: Sergio Mena y Salvador Moreno, de la empresa Aqualia.
Pajares ha explicado que hoy ha comenzado la apertura del primer cajón en el lateral de la iglesia del Corpus Christi, por el que se efectuará la limpieza de uno de los marginales del colector. Para ello se ha solicitado la colaboración de la Policía Local, ya que ha sido necesario despejar la calle de vehículos y cortar el tramo a la circulación rodada, si bien se han habilitado entradas y salidas de vehículos a los garajes y para los servicios parroquiales.
Tras esta primera fase, que tendrá una duración de unas tres semanas, se abrirá otro cajón más adelante para proseguir con la limpieza en otro de los tramos del colector.
La delegada recordó que esta actuación se realiza mientras se resuelve el proceso administrativo para proseguir con las obras del colector y antes de que comienzo el periodo de lluvias, ya que servirán para aumentar de forma importante la capacidad de recogida de pluviales del antiguo colector.
Por su parte, Sergio Mena, jefe de obras responsable de proyectos de Aqualia, ofreció algunos detalles técnicos sobre el desarrollo de los trabajos, incidiendo en la gran dificultad que entrañan al tenerse que realizar en espacio confinado, por lo que las condiciones de los operarios serán “complicadas y laboriosas”.
Así explicó que es necesario seguir un estricto protocolo de prevención y que, aunque se han previsto una duración de tres semanas para esta primera fase, se empleará el tiempo necesario para evitar cualquier tipo de incidente.
A este respecto hizo hincapié en que la extracción de lodos se realizará básicamente de forma manual, aunque habrá equipos en superficie que ayudarán a la extracción, y que si se considera que la altura libre dentro del cajón es de 1,40 metros se podrá apreciar la complicación de estos trabajos.
Además durante su ejecución será necesario una continua medición de gases, lo que obliga a extremar las precauciones e impide que se pueda trabajar a la velocidad que se desea y ocasionar las mínimas molestias a los vecinos.
Finalmente se explicó la importancia de estas obras, ya que facilitarán la evacuación de pluviales por el cajón, que actualmente tiene buena parte de su espacio interior soterrado. De esta forma se consigue la sección completa de la canalización y con ello se mejoran las condiciones de alivio de la tubería.
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