Durante el encuentro, los concejales anunciaron que antes de dos semanas el nuevo aparcamiento subterráneo que se ubica bajo la plaza estará en funcionamiento, algo que ayudará a revitalizar un espacio que ha permanecido desértico durante los años que ha durado las obras.
Asimismo, los ediles aseguraron que solicitarán a los técnicos municipales un estudio del actual estado de la circulación, por si viesen conveniente, tal y como piden los comerciantes, su modificación. Cabe recordar, que la petición es que se cambie el sentido de la circulación de la calle Fierro.
Igualmente, Verdier y Verdugo se comprometieron a ejercer de intermediarios entre los comerciantes y la empresa que explotará el aparcamiento, para que ambas partes lleguen a un acuerdo que posibilite que las personas que realicen sus compras en los establecimientos de la Plaza Mayor puedan ver rebajado el precio del estacionamiento en el subterráneo.
Por último, los ediles también se pondrán en contacto con la empresa que ha realizado las obras para trasladarle otros asuntos, como el pintado de la fachada de los comercios, que corría por su cuenta.
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