El ciudadano facilitó la descripción del tironero. Se trataba de un conocido delincuente habitual. Por ello, se personaron agentes en el domicilio del infractor, pudiendo comprobar que la descripción coincidía con la proporcionada. Al ser informado que iba a ser detenido como responsable de un presunto delito de robo con violencia, su actitud se volvió violenta y trató de zafarse de los policías, mostrando una fuerte resistencia activa, propinando patadas hacia los agentes, por lo que tuvo que ser reducido por la fuerza e introducido en el vehículo policial y trasladado a las dependencias policiales.
Por otra parte, en la noche de ese mismo día, agentes de la Policía Local detuvieron a un menor como responsable de un presunto delito de daños, ya que, junto con otros amigos, habían causado daños en un vehículo en Las Albinas. El menor fue entregado a los padres.
Seguridad vial
Durante la tarde del día 9, cuando agentes de la Policía Local realizaban servicio de vigilancia por la avenida de la Industria, observaron que el vehículo que les precedía circulaba de forma anómala, realizando zig-zag e invadiendo el carril de sentido contrario. Tras realizar varias maniobras irregulares, los agentes consiguieron que parara en la calle Marmolistas.
Cuando procedían a la identificación del conductor, apreciaron en éste claros síntomas de encontrarse bajo los efectos de bebidas alcohólicas, tales como fuerte olor a alcohol, hablar balbuciente e incoherente y pérdidas de equilibrio al apearse del vehículo. Al dar positivo en las correspondientes pruebas de detección alcohólica, fue detenido como responsable de un presunto delito contra la seguridad vial. Se trataba de A.G.G., de 51 años, y con domicilio en esta localidad.
Por la noche, fueron detenidas otras dos personas como responsables de sendos delitos contra la seguridad vial, al dar positivo en las correspondientes pruebas de detección alcohólica. El primero de ellos, J.P.C., de 26 años y domiciliado en Chiclana, fue detectado por la Guardia Civil cuando conducía un ciclomotor en carretera de Carabineros.
Otra conductora, M.M.P., de 30 años y con domicilio en esta localidad, fue detenida en la carretera de La Barrosa cuando presentaba claros síntomas de encontrarse bajo los efectos de bebidas alcohólicas, tales como fuerte olor a alcohol, habla balbuceante y ojos vidriosos, manifestando ésta, a pregunta de los policías, que había tomado “unas cuantas copas”.
El día 10 de marzo por la tarde, se recibió una llamada telefónica en la Jefatura de la Policía Local comunicando que se había producido un accidente de tráfico en la calle Doctor Pedro Vélez y que uno de los conductores se encontraba bajo los efectos de bebidas alcohólicas. Los agentes realizaron las correspondientes pruebas de detección alcohólica y, al dar positivo, detuvieron a I.I.V., de 35 años y con domicilio en esta ciudad, como responsable de un presunto delito contra la seguridad vial.
Durante la noche del mismo día, se recibió una llamada telefónica en la Jefatura de la Policía Local de Agentes de la Guardia Civil, solicitando someter a las pruebas de alcoholemia al conductor de un turismo, en cañada de los Barrancos, ya que habían detectado a un conductor realizando zig-zas e invadiendo el carril contrario para la circulación.
Cuando procedían a identificarlo, observaron que tenía síntomas inequívocos de encontrarse bajo los efectos de bebidas alcohólicas, tales como fuerte olor a alcohol en el aliento, ojos muy brillantes y enrojecidos, balbuceo al hablar y pérdidas de equilibrio, encontrándose así mismo totalmente desorientado, pues manifestaba que pretendía dirigirse hacia Conil, cuando la dirección que llevaba era justamente la contraria. Agentes de la Policía Local realizaron las correspondientes pruebas de detección alcohólica y, al dar positivo, fue detenido como responsable de un presunto delito contra la seguridad vial. Se trataba de J.G.G., de 38 años y con domicilio en Conil.
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