Cada uno de ellos recibió el relevo por parte de sus predecesores. El Cartero y la Estrella de manos de los bailaores Javier Sánchez y Macarena Ramírez. Los empresarios Fernando Amado, Manuel Ariza y Fernando Aragón que en 2011 encarnaron a Melchor, Gaspar y Baltasar hicieron lo propio con sus sucesores, en un acto con el que ponían fin a un reinado que todos recordarán para toda la vida, como ellos mismos han reconocido y es la tónica general.
No en vano, el alcalde se refería al final del acto a una circunstancia conocida por todos. “Sólo el diez por ciento de los ciudadanos quiere ser alcalde, pero el 90 por ciento quieren ser Reyes Magos”. Y tanto, porque aun sin haberse subido a la carroza y ver las caras de niños y mayores desde las alturas, ya sentían el peso de la ilusión en sus intervenciones, a la vez que el de la responsabilidad porque en Chiclana no haya este año 2012 ningún niño sin juguete a pesar de los pesares.
Ese es el principal objetivo del presidente de la Asociación de Reyes Magos, Juan Izquierdo, quien mostró su preocupación porque la situación económica enturbie la campaña anual que ya lleva meses recogiendo la ayuda de los ciudadanos. Y también mostró su esperanza en que esa solidaridad vaya apareciendo porque son muchas entidades que se están volcando por esa causa, desde comerciantes, detallistas, Cáritas Arciprestal... hasta chiclaneros de a pie.
Pero no sólo juguetes. Decía el nuevo Cartero Real que quizá en muchas casas lo que pidieran fuera una entrevista de trabajo para los padres antes que juguetes para los niños. Y es que la crisis ha hecho que los Reyes Magos de 2012 tengan un trabajo añadido que no pasó por alto durante todo el acto, la situación económica que está castigando a todos los sectores.
Y hasta la organización del acto parece que se ha adaptado a esta nueva realidad, porque la proclamación ha sido un ejercicio de sencillez dejando a un lado los audivisuales de otros años y limitándose a la lectura de los currículos de cada uno de las cinco personas que encarnarán a los personajes principales de la Cabalgata de la Ilusión del 5 de enero por las calles de Chiclana.
En menos de una hora, esas cinco personas pasaron a convertirse en el centro de los sueños de miles de niños. O como decía el Cartero Real... de cientos de padres.
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