La asociación Verdemar Ecologistas en Acción ha criticado este lunes la "mala gestión" del Ayuntamiento de San Roque, gobernado por Juan Carlos Ruiz Boix (PSOE), en el Pinar del Rey, donde "llevan años sin hacer entresaca de árboles raquíticos, pinos caídos, árboles secos ahogando a alcornoques y quejigos" y "no se gestionan las rayas cortafuegos", todo lo cual "supone un riesgo de incendio".
La asociación ecologista ha manifestado en un comunicado que denunció estos hechos en invierno del año pasado ante la Junta de Andalucía, desde donde tendrían que ser "concedidos los permisos de esos tratamientos selvícolas", pero ha apostillado también que "el Ayuntamiento de San Roque parece que no quiere resolver el problema", puesto que "es el responsable del Pinar del Rey y, al parecer, no es capaz de gestionar este monte de utilidad pública".
"La presión a la que se está sometiendo este espacio protegido es tal que acabaremos con este enclave en años si no se pone remedio", según advierten desde Verdemar, asociación que critica que "las carreras de motocross, la masificación sin control de coches en épocas punta, la gestión del acuífero, la pérdida de fuentes ancestrales, las colonias de especies invasoras, no parecen existir para el Ayuntamiento de San Roque, que mira para otro lado".
Además, la organización ecologista denuncia que "la gestión es tan mala que llevan sacando corcho desde esta primavera", pese a que, "según estudios científicos, para no perjudicar la capacidad del árbol para regenerar su corteza y para no matarlo en caso de mal manejo, se extrae el corcho durante el periodo de crecimiento activo del árbol", de forma que la saca del corcho se debe dar "entre mediados de mayo y fines de agosto", pero "de todo esto el Ayuntamiento hace caso omiso".
Verdemar Ecologistas en Acción va a "solicitar la documentación de esta actividad por si pudiera ser fraudulenta", y advierte de que "sería un lástima que, por la negligencia" del equipo de gobierno local, "se perdiese o se viese seriamente amenazado un espacio tan emblemático de nuestra comarca, cuya historia se remonta al reinado de los Reyes Católicos", cuando, entre los años 1495 y 1502, "donaron terrenos, montes, huertas y otros bienes a Gibraltar, para que fuesen fuentes de ingresos para su erario".
Siglos más tarde, tras la pérdida de Gibraltar, Felipe V autorizó que se creara la nueva ciudad de Gibraltar residente en su campo, es decir, San Roque, y "todo lo que hoy llamamos término municipal pasó a ser de la nueva ciudad y con él, todos sus bienes, incluido el Pinar del Rey", que, según siguen relatando desde Verdemar, se salvó de la llamada Desamortización de Mendizábal, y de la que durante el bienio progresista (1854-1856) realizó el entonces ministro de Hacienda, Pascual Madoz.
En el año 1800, y por cuenta de la Marina Española, se plantó un extenso pinar, con simientes procedentes de Vejer de la Frontera (Cádiz), al objeto de proveer de madera a las construcciones navales de la época, según ha explicado también la organización ecologista.
Tras la batalla de Trafalgar, en 1805, la marina entró "en fase de decadencia", de modo que "se hizo innecesaria la tala y aprovechamiento de los pinares de San Roque, que han llegado hasta nuestros días y hoy son un importante lugar de recreo y esparcimiento en la comarca del Campo de Gibraltar", según Verdemar Ecologistas en Acción, que ha reivindicado además la "encomiable labor" que durante el siglo XX realizó el entonces forestal Antonio Barberán, cuya labor "contribuyó a que el pinar viviese una de sus épocas de esplendor".
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