Tras el vapuleo recibido por el Arcos el miércoles día 14 en el José Juan Romero Gil de Gerena, que desembocó en la destitución de Bolli como responsable técnico de la plantilla arcense, mucho tenían que cambiar las cosas para que el Arcos no acabara descendiendo de categoría antes de lo esperado, habida cuenta del cariz que habían tomado los acontecimientos y el derrumbe casi absoluto del equipo. Bueno, pues las cosas han cambiado bastante después de lo visto este domingo frente al Sevilla C, líder destacado de la Fase de Descenso, a priori, el peor de los rivales que podía cruzarse en el tortuoso camino de los blancos en estos momentos de la liga.
Con el espereño Fran Garrido al mando del equipo desde el banquillo, el Arcos cambió su semblante de equipo abatido y desafortunado por el de una escuadra dinámica y alegre en sus evoluciones y comportamiento en el césped, cambiando el sistema a un 1-4-1-4-1 (a veces 1-4-3-3) y reubicando a varios jugadores a posiciones no vistas hasta ahora, como Rosales en el pivote defensivo por delante de la línea de cuatro, Iván Olmo en el lateral por detrás de Javi y Arana en la medular a pierna cambiada a la derecha de Maqui. Con estas premisas, al Arcos se le vio desinhibido y mucho más suelto en el campo, como si se hubiese quitado una prenda que no le dejase moverse a gusto, una camisa de fuerza, aunque las dudas no se despejaron tan fácilmente y menos ante un Sevilla que podía hacerle daño a balón parado, pero los hispalenses nunca gozaron de facilidades para posicionarse ante Lebrón, que solo tuvo que despejar o blocar algún balón aéreo.
El Arcos la tuvo en la primera parte por medio de Dani Guerrero con la derecha a pase de Javi Rodríguez en el 35’, pero se le marchó arriba, así como Juanmi e Ilie en sendos cabezazos sevillistas que se fueron desviados pero inquietantes. Al Arcos no se le veía tan frágil e inseguro atrás en los balones aéreos, uno de sus talones de Aquiles durante la temporada, pero le faltaba algo más de posesión de balón. El partido estaba igualado y no se veía en el primer periodo a un equipo que fuese superior al otro.
Al regreso de vestuarios, el Sevilla tuvo otra de Jaime -su mejor hombre con diferencia- en el 52’, en un error de Carretero en el despeje que dejó solo al lateral nervionense para romperla, pero la mandó al limbo, igual que otro tiro suyo en el 68’ desde fuera del área que también se marchó fuera. El Arcos achuchaba y salía en velocidad, especialmente por la banda derecha, hasta que Puerto derribó a Iván Olmo en el área y el árbitro se fue al punto de penalti. Esa fue la gran ocasión del Arcos para ganar el partido y para reengancharse en la competición, pero Pablo adivinó el tiro de Maqui y detuvo abajo. Luego Fran pudo marcar el gol de la victoria, pero el propio Maqui le taponó el tiro y el 0-0 no se movió.
Arcos CF-0
Sevilla FC C-0
Arcos: Lebrón; Iván Olmo (Eugenio, 82’), Calderón, Eladio, José Antonio; Rosales; Javi Rodríguez, Arana (Fran García, 62’), Maqui, Carretero (Cristian, 55’); y Dani Guerrero (Álvaro, 82’).
Sevilla C: Pablo; Jaime, Pavón, Puerto, Jacobo; Juanmi; Guti (Álvaro Durán, 80’), Juanma (Diego, 60’), Capi, Francis (Manzorro, 80’); e Ilie (Juan Andrés, 73’).
Árbitro: David Del Río Lozano (Granada). Amonestó a los locales Iván Olmo, Cristian y Eladio; y a los visitantes Pavón, Francis y Puerto.
Incidencias: Estadio Antonio Gallardo. Sin público por la Covid-19.
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