El proyecto hotelero previsto en la antigua residencia de Tiempo Libre, desarrollado por el Grupo Q Hoteles, continúa salpicado de polémicas. Hace dos semanas el Ayuntamiento de Cádiz, a través de la Delegación municipal de Urbanismo, paralizaba la salida de camiones con escombros de la obra para la construcción del citado hotel por el supuesto traslado de residuos a un vertedero ilegal, ubicado en El Puerto de Santa María, concretamente en Rancho Linares, donde el citado grupo también tiene previsto otro proyecto urbanístico.
Tras ese primer tropiezo, el Grupo Q ha decidido cambiar el proyecto para que el futuro hotel tenga más habitaciones, lo que conlleva también ampliar el plazo de las obras y añadir una planta más al edificio. Unas modificaciones que han generado inquietud entre los vecinos de la zona que quieren conocer el proyecto y su nueva modificación. De hecho, este viernes hay prevista una reunión entre el citado concejal de Urbanismo, Martín Vila, y representantes de la Asociación de Vecinos Muñoz Arenillas-Reina Victoria.
En dicha cita, el colectivo vecinal pondrá sobre las mesas las dudas que le despierta el proyecto al tiempo que quiere conocer la postura del Ayuntamiento respecto al mismo, sobre todo, respecto a las nuevas modificaciones del mismo anunciadas por el Grupo Q. Los vecinos saben que el proyecto y sus modificaciones tienen que ser aprobadas por el Ayuntamiento dando luz verde al Estudio Detalle del mismo.
“Ya que se va a modificar toda nuestra zona al menos que sepamos cómo”. Así se manifestaba la presidenta de la Asociación de Vecinos Muñoz Arenillas-Reina Victoria, Flor Muro, respecto a los cambios de última hora en el proyecto del Grupo Q . Desde la asociación indican que “no es que tengamos inconvenientes, más allá de los derivados de cualquier obra como son el ruido o el polvo, que son evidentes de cualquier obra ya que genera ese tipo de molestias”.
El problema es sobre todo, desde el punto de vista de los vecinos, “la falta de información absoluta”. “No sabemos cuándo empieza, cuándo termina, cómo va a ser, qué ha pasado. Hemos pasado de tener ahí, con perdón por la expresión, un ‘mamotrote’ que nos habían dicho que tenía problemas de aluminosis a hacer un cambio absoluto de toda nuestra zona. Que probablemente sea para bien, no vamos a discutirlo, pero tenemos una desinformación total”, señala. Con respecto al aumento de la altura del proyecto, la presidente afirma no saber “si la ley de costas permite eso”.
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