Es verdad que la culpa sólo la tienen el calendario, y el azar, por añadir algo, pero cuando dos equpos juegan tres partidos oficiales en diez días se nota en exceso.
Pasa como en esas parejas que se llevan juntas 40 años, y que con el paso de los días ya hablan del tiempo y poco más. Esa monotonía también se ve a veces en el fútbol, y se vio este miércoles en el césped de Nervión, donde los jugadores, al principio, parecía que se preguntaban entre ellos por la familia y se daban recuerdos.
Jugar tres veces en diez días hace que todo se conozca al dedillo, demasiado, y los esquemas y el ritmo de los partidos también lo sufre.
En ese ambiente de que nada pasaba, poco se puede contar hasta que a los 76 minutos apareció la cabeza de Guruzeta para meter un gol casi imposible, que le dio al partido otro sentido. Sí, hasta ese minuto todo era plano en el césped de Nervión. Ni siquiera se había visto el color de las tarjetas.
Ahí, Garitano movió el banquillo, y puso a Córdoba a meter peligro por banda, mientras el jovencísimo Bryan regateaba con la camiseta sevillista como los jugadores de antaño.
Casi con el 90 en el reloj, un libre directo de Unai encogía la respiración en la grada, y comenzaban tres minutos de prolongación en los que los leones rugieron todo lo que habían maullado el resto del partido.
En esos tramos de los partidos ya se juega con más corazón que cabeza, pero el Sevilla se defendió bien, aguantó las embestidas vascas, y pasó de ronda gracias al resultado del partido de ida, tras una noche sin brillo que vuelve a abrir el debate sobre la necesidad de que la Copa del Rey se juegue siempre a un solo partido.
Ficha Técnica:
Sevilla FC 0
Athletic Club 1
Sevilla FC: Juan Soriano; Gnagnon, Mercado, Carriço; Aleix, Roque Mesa, Amadou, Promes; Franco Vázquez (Sarabia, m.60), Munir y Ben Yedder (Bryan, m.70).
Athletic Club: Unai Simón; De Marcos, Núñez, Nolaskoain, Balenziaga; Iturraspe (Muniain, m.72), San José, Susaeta (Córdoba, m.81), Unai López (Dani García, m.65), Ibai Gómez; y Guruzeta.
Goles:
0-1 m. 76: Guruzeta.
Árbitro: José Luis González González (Comité castellano-leonés). Amonestó por el Sevilla a Carriço y por el Athletic a Muniain. Árbitro VAR: Hernández Hernández (Comité canario).
Incidencias: Partido de vuelta de los octavos de final de la Copa del Rey, disputado en el estadio Sánchez Pizjuán de Sevilla ante unos 26.000 espectadores.
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