El colectivo de mujeres víctimas de malos tratos que ha conseguido que el alcalde de la ciudad, José María González, cumpla con su compromiso de acompañarlas a la reunión en el Instituto Andaluz de la Mujer (IAM) siguen sin ver la luz. En el encuentro celebrado con las dos administraciones: Junta y Ayuntamiento “nos pusieron de manifiesto que hemos optado a todas las ayudas que ofrece la Junta a las víctimas de violencia de género, y que ahora se trata de un asunto de exclusión social”.
Una exclusión social que “compete” al Ayuntamiento, según quedó de manifiesto durante el encuentro. Sin embargo, el alcalde valoraba el encuentro como que “nos comprometimos a acompañar a estas mujeres al IAM y así hemos hecho. Hemos intercambiado impresiones para ver cómo coordinar ayudas y colaboraciones en general”.
González puso como opciones para estas mujeres el plan de empleo Cualifica, “una experiencia de formación becada que ofrece el IAM”, que, al parecer, sólo pueden optar tres de ellas y dependen de que la Junta saque la convocatoria o no. El alcalde adelantó que se va a ver “cuáles de las ayudas aprobadas por la Junta se han ingresado en las cuentas municipales y cuáles están pendientes”.
Durante el encuentro se habló también “de la reactivación de las políticas de vivienda por parte de la Junta y la implementación de Procasa en atención en exclusiva a estas mujeres víctimas de violencia de género”. González Santos se muestra “optimista con este tipo de reuniones: que las administraciones rememos en el mismo sentido”.
Mientras tanto, fuentes de la Administración autonómica destacaron que estas mujeres “ya han optado a todos los recursos que tiene el Instituto Andaluz de la Mujer”. Tras el encuentro se puso de manifiesto, según estas fuentes que “este colectivo lo que tiene ahora es un problema de exclusión social con aspectos como la vivienda o el alimento. Y este tipo de ayudas son competencia municipal”.
Desde la Junta, “hemos puesto a su disposición todos los recursos, pero al ser un asunto de exclusión social quien tiene que articular la asistencia es el propio Ayuntamiento”.
Las mujeres víctimas de malos tratos salieron del encuentro “decepcionadas porque al final no se concreta nada, se dejan las cosas sobre la mesa y no nos aclaran qué podemos hacer”.
Garantía alimentaria
Lo único que han sacado en claro estas mujeres es que se las va a incluir en el programa que desarrollan a medias Ayuntamiento y Junta de Andalucía de garantía alimentaria para niños durante los meses de julio y agosto en el colegio Gadir. Las mujeres se cuestionan “qué hacemos con los niños los fines de semana?, ¿celebramos el Ramadán?”. Durante el encuentro tampoco se aclaró por qué no tienen preferencia como víctimas de violencia de género a la hora de optar a una vivienda, a través del Registro Municipal, o en qué opciones formativas o de empleo pueden participar con seguridad. Desde la Junta de Andalucía se pusieron sobre la mesa las cifras del dinero que se ha transferido al Ayuntamiento para este tipo de personas con problemas de exclusión social, así como para ayudas al pago de la luz y el agua. “Y desde el IAM nos han aclarado que quien se tiene que hacer cargo de nosotras es el Ayuntamiento, porque las ayudas por violencia de género ya están cubiertas”, dicen estas mujeres.