La demanda fue contra Onda Cádiz, pero al ser una empresa municipal, quien tendrá que hacer frente a ella es el Ayuntamiento.
El Ayuntamiento de Cádiz ha sido condenado por el “despido improcedente” de un periodista que trabajó durante los últimos años en Onda Cádiz Radio y Televisión. La demanda fue contra Onda Cádiz, pero al ser una empresa municipal, quien tendrá que hacer frente a ella es el Ayuntamiento. Se trata del conocido profesional Guillermo Riol, que todas las mañanas se encargaba de un magazine de radio y que también elaboraba, junto a sus compañeros, un programa sobre la Semana Santa de la ciudad de Cádiz. Este profesional fue despedido después de las elecciones municipales.
La sentencia reconoce el despido improcedente, y el Ayuntamiento no ha querido llegar a juicio. El Ayuntamiento no se personó, tan solo Onda Cadiz y Cadiz Conecta estuvieron representadas por su abogado con poderes. Se llegó a un acuerdo para no entrar en la sala.
Ahora, el Consistorio gaditano tendrá que usar dinero público para pagar a un trabajador despedido de manera improcedente.
Es el segundo despido improcedente al que se enfrenta este Gobierno, después de que, tal y como publicó este medio, también tuvieran que hacer frente a la indemnización de una agente local de empleo, haciendo uso de la reforma laboral del PP que tanto han criticado.
